A fines del mes de junio la Asociación de Funcionarios Aduaneros (AFA) emitió un comunicado en que se declara en "estado de alerta en pos de la defensa de la función aduanera". El texto señala que distintos puestos de control aduanero "se están desmantelando debido a carencias de toda índole", como "falta de personal, una flota de vehículos de la cual el 95 % están fuera de servicio y recortes en los viáticos".
Además, sostiene la carta, hay "una clara extralimitación de funciones" por parte de los militares que en procedimientos aduaneros incautan mercadería en presunta infracción aduanera.
Este jueves, el director de Aduanas, Jaime Borgiani, se refirió en conferencia de prensa sobre este asunto, donde afirmó que se reunió con los funcionarios aduaneros, los cuales le manifestaron alguna disconformidad y supuestas ilegalidades en el accionar militar. Sin embargo, dijo que "quedó muy claro" que no hubo irregularidades.
En este sentido, agregó que sí hay que mejorar temas en el protocolo de actuación, el cual tienen que ver con qué pasa cuando la aduana "no responde". "Pero sin duda este es un ejemplo de que con recursos escasos hay que aplicarlos de la mejor manera", sostuvo el director de Aduanas en declaraciones consignadas por Radio Uruguay.
"La mayoría de los funcionarios aduaneros están agradecidos porque se colabora con su accionar de control y se los protege porque tenemos lugares en que no estamos y que no podemos estar porque, por ejemplo, en algunas ocasiones tenemos un funcionario solo en un puente. No es lo mismo estar solo que tener la protección y el respaldo de las Fuerzas Armadas. Por lo tanto, no hubo ningún otro problema, más que algún ajuste de algún protocolo", concluyó.