Luis Fernando Camacho, gobernador de la región de Santa Cruz y opositor al gobierno nacional, fue detenido este miércoles por la Policía por orden de un fiscal, informó el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo.

“Informamos al pueblo boliviano, que la Policía Boliviana dio cumplimiento a la orden de aprehensión en contra del señor Luis Fernando Camacho”, dijo del Castillo.

Camacho tiene investigaciones en su contra por ser considerado como pieza clave en la renuncia de Evo Morales a la presidencia en 2019 y otra por promover entre octubre y noviembre de este año protestas regionales para adelantar un censo de población fijado para 2024.

Según medios locales, el gobernador de la región más poblada de Bolivia fue trasladado al aeropuerto de Santa Cruz, con el fin de ser llevado a La Paz.

El ministerio público afirmó que Camacho está acusado de “terrorismo” por el caso denominado “golpe de Estado” contra el expresidente Evo Morales en noviembre de 2019, el mismo por el que la expresidenta Jeanine Añez está sentenciada a 10 años de prisión.

Camacho dijo varias veces que nunca hubo un golpe, sino una rebelión popular contra Morales (2006-2019), a quien acusó de haber hecho fraude en las elecciones presidenciales de 2019 para gobernar por cinco años más. La Organización de Estados Americanos (OEA) hizo un informe en el que reveló “irregularidades” en los comicios. 

“En estos momentos se desconoce el paradero del gobernador, por lo que responsabilizamos al gobierno del presidente Luis Arce por la seguridad física y la vida del gobernador”, dijo la gobernación de Santa Cruz en un comunicado.

Además, el escrito indicó que “el gobernador de Santa Cruz ha sido secuestrado, en un operativo policial absolutamente irregular y llevado con rumbo desconocido”.

Protestas callejeras

Tras conocerse la detención de Camacho, decenas de sus militantes se agolparon en los dos aeropuertos de Santa Cruz: el internacional de Viru Viru y el doméstico del Trompillo.

A gritos decían que no permitirían el traslado de Camacho a La Paz y demandaban su liberación, según imágenes del canal de televisión Unitel.

En el Trompillo, los manifestantes obligaron por la fuerza a una reducida guardia militar a que abandonen sus labores de seguridad.

En varios barrios de Santa Cruz se registraron cortes de calles con el uso de piedras, palos e incluso vehículos, para exigir la libertad de Camacho.

Los manifestantes también quemaron las oficinas de la Fiscalía de la región, sin reportarse de heridos.

De un lado y del otro

Tres expresidentes bolivianos, Áñez (2019-2020), Jorge Quiroga (2001-2002) y Carlos Mesa (2014-2018), se sumaron a las voces que denunciaron la detención del gobernador.

“Montan megaoperativo policial/militar para secuestrar a gobernador”, dijo Áñez en Twitter, mientras que Quiroga manifestó por la misma vía que la “policía aprehende violentamente al gobernador de Santa Cruz”.

Mesa señaló que “esto viola principios de derecho internacional”. “Exigimos a [al presidente] Luis Arce que aclare esos temas de inmediato”, afirmó.

En tanto, los oficialistas reaccionaron a favor de la detención.

El ministro de Obras Públicas, Edgar Montaño, manifestó: “En su condición de aprehendido, esperemos que responda por los delitos que se lo acusa”, como “del golpe de Estado del 2019”.

Wilfredo Chávez, Procurador General del Estado y exministro de Morales, dijo que “la justicia debe operar sobre este sujeto. Justicia!”.

Camacho es uno de los principales líderes de derecha y comanda la segunda fuerza política de la oposición en el Parlamento, Creemos, detrás del partido Comunidad Ciudadana, del expresidente Carlos Mesa.

El Movimiento Al Socialismo, del presidente de izquierda Luis Arce y de su mentor, Evo Morales, es la principal fuerza legislativa.

Con base en AFP