La curiosidad humana motiva la predisposición a escuchar con especial atención cualquier historia que contenga palabras como "asesinato", "sicariato", "(des)amor", "fiestas swingers" y "políticos". No en vano la mediatización de historias de poca relevancia y gran morbosidad frente a la ignorancia de otras con mayor trascendencia pero pocos condimentos apetitosos para la audiencia. El caso de la Mansión del Sexo hace la excepción.
El 10 de julio de 2018, un hombre de 45 años fue asesinado de un disparo en la puerta de su casa, en Maldonado. Según Fiscalía, la demanda millonaria que le iba a presentar a su exesposa se presentaba como una de las posibilidades de este encargo, porque esta mujer era y es la princesa gitana. Ambos se casaron y tuvieron dos hijos pero los años los llevaron a divorciarse, aunque en buenos términos. Incluso siguieron viviendo en la -mal llamada- "Mansión del Sexo" junto a sus respectivas parejas.
Con el tiempo la relación entre el matrimonio se fue desgastando, sobre todo entre Edward Vaz (el hombre asesinado) y el novio de su exesposa, la princesa gitana. En ese contexto, Edward se muda y un día le disparan en la puerta de su casa, hecho que daría inicio al caso.
Actualmente hay 5 personas en apelación esperando a que se les revierta la condena o se les baje, un condenado que no apeló y el autor material esperando el juicio que se llevará a cabo de forma separada. Esta cantidad de implicados se debe a que hay dos sicarios, dos choferes, dos autores intelectuales y un cómplice que añaden complejidad y número de versiones sobre lo ocurrido.
Algunos dicen que disparó uno de los sicarios, otros dicen que fue el otro, hay una bala cuyo origen se desconoce, la escena del crimen no está reconstruida con detalles y otras inconsistencias son las que despiertan la curiosidad de muchas personas que intentan entender qué fue lo que pasó aquel día en Punta del Este. ¿Fue su exesposa quien lo mando matar o el novio de ella? La segunda bala: ¿salió de las manos de Edward o de una maniobra rebuscada de uno de los sicarios?
Por si esto fuera poco, a raíz del asesinato surgen otros condimentos, como por ejemplo que en esa casa y en otras, se organizaban fiestas swingers para millonarios con tickets de hasta 1000 dólares por pareja. También que un expolítico argentino estuvo involucrado en estas fiestas y fue quién pagó la construcción de la casa que da nombre al caso. ¿Por qué lo hizo? Porque estaba en una relación con Leticia, la mejor amiga de la princesa gitana.
Es evidente la complejidad que atrajo a tantos medios argentinos como también uruguayos en su momento de máxima mediatización. Sin embargo, hubo una persona que siguió el caso desde el inicio e incluso en los momentos más bajos de la investigación y es Fernanda Kosak, periodista uruguaya y escritora del libro "La Mansión del Sexo: el caso de Lulukhy, la princesa gitana".
En este #PortalExplica nos centramos en el asesinato de Edward Vaz y toda la trama detrás del homicidio en diálogo con Fernanda Kosak.