Un grupo de inversionistas denunció ante la Policía, precisamente al departamento de Crimen Organizado, que un joven exrugbier cometió una estafa que asciende a los US$ 65 millones.

Los investigadores reunieron datos de alrededor de 200 víctimas que habrían sido parte de la maniobra fraudulenta que tuvo a la cabeza al deportista que llegó a vestir la camiseta de los Teros.

Según informó el periodista Eduardo Preve y confirmó Montevideo Portal con fuentes de la investigación, los damnificados entregaban el dinero para que el joven lo invirtiera en el mercado de valores, con la promesa de recibir una renta en dólares de hasta 6%.

Entre los clientes que tenía el uruguayo había personas de Brasil y Argentina que se relacionan con el ambiente empresarial de esos países. El denunciado perdió el dinero —cuyo destino por ahora es una incógnita— y en ese momento comenzaron los reclamos.

Los informantes indicaron que el hombre sabía que la Policía estaba tras sus pasos, por lo que hace algunos días tomó un avión y se fugó con toda su familia. No está confirmado el destino aún, pero se investiga si se encuentra en Estados Unidos.