El secretario de la Presidencia, Álvaro Delgado, dialogó en la tarde de este jueves con los medios de prensa donde fue consultado sobre varios asuntos. En primer lugar, Delgado destacó la labor del presidente, Luis Lacalle Pou, y dijo que se siente "orgulloso" por cómo actuó frente a este foco en el departamento de Rivera.

"La verdad yo me siento muy orgulloso como uruguayo que un presidente de la república, ante la inminencia de un foco incipiente en la ciudad de Rivera, en una frontera compleja, seca y binacional como la que tenemos con Brasil, el domingo y lunes esté en el departamento, dialogue con las autoridades, escuche a todo el sistema de emergencia, a todos los actores responsables y decida, tres días después, volver para ver si parte de las medidas que se anunciaron y se decidieron se estén cumpliendo en el uso de la libertad responsable", aseguró Delgado en declaraciones recogidas por 970 Noticias.

Delgado hizo suyas las palabras del presidente, en el sentido de que el gobierno, más allá de la "Comisión Binacional", trabaja para combatir y prevenir el coronavirus. En este sentido, destacó que se están realizando aleatoriamente 1180 test de COVID-19 organizado por el Instituto Nacional de Estadística.

"Hasta el momento es un tema que se ha ido controlando, que tenemos un hilo epidemiológico y la verdad que la gente de Rivera valoró mucho que se haya estado directamente involucrados en la ciudad", sostuvo el secretario de Presidencia.

Consultado por los medios de prensa por las otras fronteras que tiene nuestro país, como por ejemplo en Rocha o en Aseguá, Delgado dijo que en la frontera de las ciudades de Rivera y Libramento viven 200.000 personas lo que implica "otras dimensiones". "Estamos viendo un tema integral de fronteras. Hoy el ministro de Salud Pública y el presidente de ASSE están en departamentos de frontera, trabajando en toda la línea con Brasil donde hay ciudades donde la vida es binacional", dijo. 

Consultado finalmente sobre la respuesta del gobierno carioca, Delgado dijo que, desde el primer nivel, que es hablar con Bolsonaro, hasta el resto de los estamentos del gobierno, hubo "una voluntad de empezar a coordinar con mucha más fuerza en la frontera preventivamente".