El legislador suplente por el Partido Nacional Sebastián Da Silva dijo que le dan “gracia” las expresiones de rechazo de dirigentes que apoyan el plebiscito de reforma de la seguridad social a la campaña de más de 111 frenteamplistas expertos en distintas áreas que se oponen al plebiscito.

“A mí me da mucha gracia la cancelación que le quiere hacer el Partido Comunista y el Pit-Cnt a los economistas que dieron su opinión”, apuntó Da Silva a Telenoche este domingo, en el marco de un acto de la Lista 40 en el Barrio Peñarol.

En esta línea, argumentó que estos miembros del Frente Amplio, entre los que hay tres exministros de Economía, “tienen derecho a dar su opinión”.

“El problema es que cuando están entreverados como carne para chorizo el Pit-Cnt y el Frente Amplio pasan estas cosas, porque son lo mismo”, consideró y apuntó: “Cuando hacés una campaña en base a comer tortas fritas y no sé qué otra cosa, pasan estas cosas que son naturales”.

A continuación, se preguntó: “Marcelo Abdala, ¿en nombre de quién habla? ¿Del Partido Comunista o del Pit-Cnt? Y los otros que se quejan, ¿en nombre de quién hablan?”.

“Esa mezcolanza es la que nosotros no queremos que vuelva al gobierno”, añadió y criticó que en el FA “pensaban que era decir dos o tres cosas” para ganar la elección. “Queda claro que el pueblo uruguayo exige que los políticos expliquen qué es lo que quieren hacer”, opinó.

Asimismo, habló sobre la seguridad en el país y criticó la gestión frenteamplista en esta área. “El Frente Amplio no es la solución para los temas de seguridad”, consideró.

“Es como si algún colectivo LGTB pide más derechos y termina votando a Cabildo Abierto. Eso sería el equivalente a que alguien que pide más seguridad termine votando a los que construyeron en 15 años una desaparición de valores que hace que hoy estén proliferando los malandras”, razonó.

Además, afirmó que “no hay malandras que tienen cuatro años”. “No hay malandras de nuestra gestión de gobierno, todos estos que se están matando es producto de que en 15 años hubo un vacío de valores que termina en este desastre que estamos viendo”.

“A todos estos malandritas que se terminan matando entre ellos lo que hay que hacer es prevenir con más represión, pero es difícil por ese cambio de valores dramático que se ha dado”, consideró.

Por último, comparó lo que sucede en Uruguay con las favelas de Río de Janeiro. “Me acuerdo de que cuando era chico vi la película Ciudad de Dios que mostraba cómo se mataban a balazos en la ciudad de Río [de Janeiro]. Bueno, acá está sucediendo lo mismo por 300 o 400 pesos”, expresó.