La vicepresidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, aseguró este viernes que la renuncia de Martín Guzmán como ministro de Economía días atrás fue un acto de “irresponsabilidad política” y de “desestabilización institucional”.
En un acto en la provincia de Santa Cruz, la también expresidenta (2007-2015) negó que ella quiera “revolear” algún ministro en medio de un contexto de tensiones en el oficialismo, donde el ala más dura del peronismo-kirchnerismo pone en aprietos al presidente, Alberto Fernández.
“La renuncia de Guzmán fue un inmenso acto de irresponsabilidad política”, dijo la también expresidenta Fernández (2007-2015) en un acto en la provincia de Santa Cruz.
En su discurso, la líder del sector kirchnerista del Gobierno dijo que el país merece una “discusión en serio” de sus problemas.
Los días de inestabilidad política que vive el vecino país han repercutido en el ya ajetreado panorama económico en el que el contexto de alta inflación ha encarecido el costo de vida de millones de argentinos.
Guzmán, uno de los mayores blancos de críticas por parte de la vicepresidenta, anunció públicamente su renuncia por redes sociales y pasó a formar la lista de funcionarios reemplazados.
“Tenemos que tener responsabilidad política ante la sociedad. Fue un acto de desestabilización institucional. Hacerlo enterar al presidente (Alberto Fernández) de una renuncia por Twitter no me parece bien”, afirmó Cristina Fernández.
“Me parece un gesto de ingratitud hacia el propio presidente. No niego las diferencias, pero este presidente había bancado (respaldado) a ese ministro como a nadie enfrentado inclusive con su propia coalición. ¿Se merecía eso?”, preguntó de forma retórica la vicepresidenta.
Guzmán fue reemplazado por Silvina Batakis, exministra de Economía de la provincia de Buenos Aires (2011-2015), quien abogó por mantener el programa financiero impulsado por su antecesor y cumplir las metas fijadas con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para refinanciar el crédito de 44.000 millones de dólares otorgado en 2018, durante el macrismo.
Por otra parte, la vicepresidenta aclaró: “No voy a revolear a ningún ministro, quédense todos muy tranquilos”.
Sus apariciones públicas suelen marcar la agenda y condicionar el poder de maniobra del presidente, que no consigue aplacar la inflación o la devaluación del peso.
Cristina Fernández siempre culpó a ciertos ministros que “no funcionan” como Guzmán o Matías Kulfas, quien fue obligado a dimitir del Ministerio de Desarrollo Productivo el mes pasado por el propio mandatario.
Actualmente, solo 8 de 21 ministros del Gabinete original, presentando por el jefe de Estado, siguen en carrera, varias de esas destituciones están vinculadas a tensiones con el kirchnerismo.
“El país merece una discusión en serio de los problemas que tienen los argentinos. Tenemos que encontrar un punto de coincidencia común porque, si no, no va a haber Argentina para nadie”, aseguró Fernández.
Por último, la expresidenta consideró necesaria una autoconvocatoria para la construcción de una Argentina con paz social.
Con información de EFE