Cuba prevé apagones durante todo este sábado, cortes del suministro que en el momento de mayor demanda, en la tarde-noche, afectarán a más del 48% del país de forma simultánea, informó la estatal Unión Eléctrica (UNE).
La crisis energética estructural que sufre Cuba desde hace años se ha agravado desde finales de agosto por las repetidas averías en las centrales termoeléctricas y la falta de combustible, una situación que tiene al borde del colapso al Sistema Eléctrico Nacional (SEN).
En los últimos dos meses el país ha registrado tres apagones nacionales, de los que ha tardado hasta cinco días en recuperarse.
En las últimas semanas la tasa diaria de máximo déficit se encuentra frecuentemente por encima del 40 % y ha llegado a superar en algunas ocasiones el 50%. El máximo anual se marcó este jueves con más del 53 %.
El informe actual de la UNE, perteneciente al Ministerio de Energía y Minas, estima para la tarde-noche de esta jornada una capacidad máxima de generación eléctrica de 1.660 megavatios (MW) para una demanda que alcanzará los 3.080 MW.
El déficit -la diferencia entre oferta y demanda- será de 1.420 MW y la afectación -los circuitos que se desconectarán realmente- alcanzará los 1.490 MW durante el momento de mayor demanda.
Según la UNE, ocho de las 20 unidades de generación (distribuidas en las siete centrales termoeléctricas) están averiadas o en mantenimiento. Además, 79 motores y grandes generadores (a diésel y fueloil) y gran parte de los motores de dos de las tres patanas (centrales flotantes rentadas) se encuentran parados por falta de combustible.
El SEN de Cuba se encuentra en un estado muy precario por la carencia de combustible -por la falta de divisas para importar- y las frecuentes averías en las obsoletas centrales termoeléctricas, en su mayoría con más de 40 años de explotación y un déficit crónico de inversiones.
Los frecuentes cortes tienen un importante coste económico y social. Gran parte de la industria estatal aún operativa y la administración pública se encuentran fuertemente afectadas, incluso paralizadas. El sector no estatal tiene asimismo obstaculizada su actividad.
La economía nacional se contrajo un 1,9 % en 2023, según datos oficiales, y el Gobierno estima que no habrá crecimiento el actual ejercicio.
Los apagones también han contribuido a atizar el descontento social, evidente en la actual ola migratoria sin precedentes y en las protestas antigubernamentales de los últimos años, incluidas las del 11 de julio de 2021 -las mayores en décadas-, las de Nuevitas y La Habana en agosto y septiembre de 2022, y las del pasado 17 de marzo en Santiago de Cuba (este) y otras localidades.
EFE.