Después de que la semana pasada se dieran a conocer varios grafitis en diferentes edificios de Montevideo, se desató la polémica dentro del sistema político. Así, hubo diferentes intercambios entre el oficialismo y la oposición. La precandidata frenteamplista, Carolina Cosse, apuntó este martes contra su par blanco Álvaro Delgado, quien dijo estar “preocupado” por la postura de la intendenta de Montevideo, ahora de licencia, sobre esta temática.
“Solamente en este gobierno una persona escala cinco pisos para grafitear un balcon y no pasa nada”, dijo Cosse en rueda de prensa. De este modo, la precandidata por el Frente Amplio aseguró que no está “a favor de que se grafitee la propiedad privada ni la pública”.
“Verdaderamente hay que avisarle a Delgado que quien tiene que proteger la propiedad privada es el Ministerio del Interior”, dijo la intendenta.
“Cuando le preguntan a Cosse, habla de expresiones culturales y, en algunos casos, mezcla con conceptos peligrosos, la aprobación colectiva. A ver, nosotros somos muy claros en esto, e incluso hablamos con el presidente de la Comisión de Patrimonio [William Rey], que está elaborando un proyecto de ley para penas más duras para aquellos que grafitean edificios de propiedad privada o monumentos históricos”, señaló el pasado sábado Delgado.
“Yo lo comparto, porque esas cosas las tenemos que cuidar. Los monumentos los tenemos que cuidar como sociedad, como las plazas, porque es con el aporte de todos que los hicimos y en realidad es para disfrute de todos. Cuando alguien sube un balcón de un edificio a un apartamento a grafitear, a mirar para adentro o a querer hacer otra cosa, se llama violación de domicilio y es un delito. Acá no hay una expresión cultural. Nosotros estamos en la vereda opuesta a Carolina Cosse”, concluyó el precandidato blanco.
En tanto, sobre la labor de la Intendencia de Montevideo ante grafitis en edificios públicos, Cosse aseguró que desde la comuna “cada vez que se grafitea un monumento, tratan de limpiarlo enseguida”. “Tenemos que correr al ritmo de quienes lo grafitean”, agregó.
“Cualquier persona en una casa, en un comercio, cuando le grafitean la pared, la sensación que tiene, me imagino y lo puedo entender, es de una profunda angustia y es un problema”, señaló.
Por eso, aseguró que “es un tema que hay que tomar, seguramente, con más profundidad”, porque “es de difícil resolución a nivel mundial”.
Cosse recordó que, ante este tipo de intervenciones, los montevideanos se pueden comunicar al 092 250 260; se debe mandar una foto y la ubicación del grafiti.