El ministro de Defensa Nacional Javier García ratificó este sábado sus dichos sobre el procesamiento del exsoldado Leonardo Vidal, que en 1972 mató al militante tupamaro Nelson Berreta por la espalda cuando este quiso huir mientras estaba esposado.
Berreta recorrió aproximadamente 30 metros, esposado, circunstancia en la que el teniente Sergio Velazco (hoy fallecido) le ordenó a Vidal abrir fuego, recibiendo Berreta una ráfaga de ametralladora. Vidal fue procesado por homicidio con prisión efectiva.
"Ratifico, con respeto y también con la firmeza democrática y republicana que corresponde, todo lo dicho en la nota. Lo reafirmo 100% en su fondo, tono y por lo que representa el lugar donde fue dicho", dijo el titular de Defensa en su cuenta de Twitter. Había criticado que el procesado es "una persona de 70 años, enferma, que tiene problemas serios de salud, que vive en un lugar carenciado y que, cincuenta años después del episodio que motivó el procesamiento, vive esta circunstancia", cuando solo estaba cumpliendo órdenes.
García había recibido críticas por parte del Frente Amplio y del grupo Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos, que mostraron su preocupación por lo que entienden puede ser una presión a la Justicia.
El Frente Amplio entendió que los dichos de García son de "extrema gravedad". "Sus apreciaciones son violatorias de la Constitución, de la ley y atentan contra la separación de poderes que rige nuestra forma republicana de gobierno. Constituyen, asimismo, un ataque a la independencia del Poder Judicial", se señala en la declaración.
Además, en el texto el Frente Amplio recordó que "la responsabilidad penal de un crimen que puede ser calificado de lesa humanidad no prescribe".
Más críticas
Tras la ratificación de García, la senadora Carolina Cosse (Frente Amplio) dijo a Montevideo Portal que las declaraciones del ministro le parecen "muy graves".
"Me parece muy grave que desde el Poder Ejecutivo tanto el presidente como el ministro de Defensa cuestionen de esa manera al Poder Judicial, y además con argumentos que creo no se ajustan a los principios más básicos de la ética", afirmó.
"El ministro dice ‘fíjese cómo se siente un soldado ahora si le dan una orden y lo van a condenar 50 años después'. Bueno, porque hay criterios humanos para seguir una orden. Si le ordenan disparar por la espalda a alguien que está esposado, no la tiene que cumplir la orden. Y eso va mucho más allá de cualquier circunstancia histórica", dijo la senadora.
Reafirmó que "es grave por el cuestionamiento institucional y por el mensaje peligrosamente sesgado en términos de ética del ministro a la población".