La investigación de las denuncias al expresidente argentino Alberto Fernández por presuntas lesiones a su excompañera, Fabiola Yañez, podría afrontar un escollo.
Según informara la revista Pronto, en sus declaraciones a la Justicia Yañez dijo que extravió el celular que contenía las comunicaciones incriminatorias para con Fernández. Yañez, que compareció de manera telemática desde el país europeo, refirió que extravió el aparato cuando se trasladó del apartamento que compartía con Fernández en Madrid a otro, también en la capital española, donde reside actualmente.
Para colmo de males, los registros de esas conversaciones tampoco podrían localizarse en el celular de Fernández, actualmente radicado en Buenos Aires y recientemente imputado.
En una entrevista con el periódico matritense El País, el presidente del país vecino aseguró que los chats con Fabiola Yañez de los años 2022 y 2023 “desaparecieron” de sus dispositivos. “No tengo manera de corroborar cómo fue toda esa conversación”, expresó en el reportaje.
Pese al contratiempo, la Justicia argentina confía en poder reconstruir los intercambios y buscar otras pruebas que corroboren el relato.
Tras la mencionada declaración, Yañez se comprometió a entregar a la Justicia los intercambios de los últimos meses en forma de capturas de pantalla, algo que haría este lunes o “en los primeros días de la semana”, de acuerdo con el citado medio.
De estas capturas podrían surgir evidencias que compliquen la situación de Fernández si se comprueba que violó la orden judicial de no comunicarse con ella, disposición que entró en vigor el pasado 6 de agosto.
Más allá de la dificultad señalada para acceder a los chats entre denunciante y denunciado, la Fiscalía dispone de la conversación completa entre Fabiola Yañez y María Cantero, secretaria de Fernández, entre el 24 de junio de 2021 y el 16 de marzo de 2023.
Si existieron comunicaciones a través de otro teléfono o servicio de mensajería de la exsecretaria de Alberto Fernández, aún no se han integrado a la causa principal ni a la de violencia de género que tramita en el mismo juzgado. En esas comunicaciones se revelan datos que “podrían ser valiosos” en la causa.