El Poder Ejecutivo resolvió este lunes una suba en el precio de los combustibles de $ 3 para la nafta (Súper y Premium) y también de $ 3 para el gasoil (50 S y 10 S).
De esta forma, a partir del 1°de febrero el litro de nafta Súper será de $ 73,41 (aumento de 4,26%) y el del gasoil 50S de $ 52,94 (aumento de 6%).
También aumentó $ 3 el kilo de supergás, informó el ministro de Industria, Energía y Minería, Omar Paganini en conferencia de prensa. El kilo de supergás pasará de tener un costo de $ 56,16 a $ 59,16 el kilo.
“Pese al aumento del 15% en el petróleo registrado en el último mes -que se suma a las subas acumuladas en los meses previos y a los sobrecostos locales-, el Poder Ejecutivo ha definido un ajuste significativamente inferior a lo que correspondería”, señaló el Ministerio de Industria Energía y Minería en un breve comunicado.
Se agregó que “nuevamente el Ejecutivo decidió utilizar ganancias extraordinarias de ANCAP para atenuar la fuerte escalada de los costos que se viene registrando”.
“El ajuste de los combustibles que rige a partir de las 00:00 horas de este 1º de febrero, será de $ 3 para los combustibles de mayor consumo. Se trata de un aumento significativamente menor al de los precios internacionales reflejados en el PPI que publica URSEA, que se vieron impulsados por una fuerte suba del petróleo y de los fletes. El último ajuste de tarifas se realizó en agosto de 2021 y desde esa fecha el gobierno viene absorbiendo el 100% de los incrementos con las ganancias extraordinarias de ANCAP, que se destinaron a beneficiar a los consumidores de los combustibles”, apuntó la cartera.
El último ejercicio teórico publicado por la Ursea (comparado con su informe previo) marcaba un aumento en enero de 7,59% para el gasoil (50 S), de 8,60% para la nafta Premium 97 y de 8,73% la nafta Súper 95, en línea con la fuerte suba que ha experimentado el barril del petróleo en los mercados internacionales en las últimas semanas.
Además de la suba del barril del petróleo en el mes de enero, si se considera desde el mes de agosto (última vez que se ajustaron las tarifas en los combustibles) el acumulado de suba para el gasoil según la Ursea fue de 18,7%, mientras que para las naftas fue de 11,5%, en los precios de paridad en planta (antes de costos de distribución e impuestos).
A este factor también hay que agregar lo que el gobierno considera el factor X, sobrecostos y subsidios que se establecieron en $ 2,97 por litro.
Debería “ser el doble”
Paganini dijo que el gobierno decidió “tener que generar un ajuste mínimo en los combustibles tomando en cuenta el aumento muy fuerte en los costos del petróleo en el último mes” y el “acumulado desde la última vez” que se ajustó.
“Se hizo el aumento, el menor posible dado que hay que tomar en cuenta también las finanzas de Ancap. Se van a seguir utilizando lo que quedan de las ganancias extraordinarias de Ancap del año pasado para mitigar lo que ha sido el aumento en los costos”, explicó el jerarca.
Paganini dijo que con este ajuste, que debería “ser aproximadamente el doble”, Ancap resigna alrededor de US$ 10 millones mensuales por no ir acompasado los precios de los combustibles con los Precios de Paridad de Importación (PPI) más demás costos.
“Lo que quiere el gobierno es en lo posible no trasladar a la ciudadanía y a la economía el aumento de costos internacional que se está dando, que es muy notorio”, señaló.