Los propietarios del exastillero Maffoni y de los tres barcos que se desamarraron de él la semana pasada, serán objeto de una denuncia penal por parte del Ministerio de Transporte y Obras Públicas, secretaría que entende que hay responsabilidad en el accidente que daño el centenario puente de Carmelo.

"La autorización para que los barcos llegarán ahí nunca fue de la Dirección Nacional de Hidrografía", dijo el ministro Víctor Rossi en declaraciones recogidas por el matutino El País, agregando que dicha Dirección intentó en el año 2006 evitar el ingreso de las naves, algo que finalmente fue permitido por la Prefectura Nacional Naval.

De momento se trabaja en el retiro de los barcos siniestrados yen la rehabilitación del puente, ya que se trata de una importante vía de acceso a la ciudad de Carmelo. Según Rossi, el puente en principio sería reparable, yel costo de dicha labor se estima en cerca de tres millones de dólares. Sin embargo, como los barcos todavía están en contacto con la estructura, es prematuro arriesgar cifras definitivas, debido a que durante la tarea de remoción podrían producirse más daños.

Por otra parte, vecinos de la localidad preparan su propia estrategia legal, y demandarían tanto al propietario de las embarcaciones como al Estado.

Según informara Subrayado, la abogada Paola Sartori convocará a comerciantes y vecinos que consideren que se vieron perjudicados por el accidente, para presentar una demanda colectiva.

El antiguo astillero está situado sobre el Arroyo de Las Vacas y alberga a unas catorce embarcaciones, pese a que -según la representante legal- el sitio no está habilitado para ello.

El puente giratorio de Carmelo fue inaugurado en el año 1912, y fue el primero de su tipo en con continente. En 2012, en ocasión de celebrarse su centenario, el entonces alcalde de Carmelo, Alejandro Bruzco, ya había llamado la atención sobre los problemas que la añosa estructura podía afrontar en los años subsiguientes.