Chance de los candidatos en octubre

Lo que cambió es que hace 2 años atrás “nadie sospechaba que Lacalle podría volver a ser presidente” pero advirtió que esa situación “no nos puede engañar”.

“Lo que sabemos es que hay un partido que probablemente siga siendo el más votado, que es el partido de gobierno”, pero también “hay un desafiante del Partido Nacional, que ahora aparece con mucha más chance de lo que la gente le atribuía hace unos meses”.

En esa línea de pensamiento y en la misma que señalan varias encuestas “el Frente comienza la campaña electoral en condiciones más competitivas que hace 5 años, pero ninguna de esas cosas puede pronosticar un resultado para octubre. Decir eso es pequeño intelectualmente. La elección es impronosticable”, concluyó el director de la encuestadora CIFRA.

La fórmula uno

Acerca de la fórmula del Partido Nacional, González sostuvo que “es la mejor fórmula que podía presentar”, pero también comparó este anuncio con el ritual de tomar un té y dijo que lo importante no es el té en sí mismo, sino la ceremonia. En ese sentido aclaró que “lo que importa no es solamente la fórmula sino cómo se llega a construirla”.

Además se refirió a la frase que Larrañaga usó en la noche del domingo `A lo blanco y sin condiciones´, y dijo que “es premonitoria” y que transmite “una identidad de fondo muy importante”. También señaló que “el significado de las cosas se adquiere no por la sustancia, sino por la comparación con el contexto” que está dado la fórmula del FA.

En referencia a ello y “en términos automovilísticos, en vez de salir en primera fila sale en tercera”. Pero eso no lo condena a perder, “en absoluto”. Entre otras cosas “porque Mujica ha demostrado ser un político excepcional. Primero ganó en la liga en diciembre y después volvió a ganar en la cancha indiscutiblemente el domingo pasado”.

Pero más allá de cómo se defina la fórmula y de que unos arranquen en primera y otros en tercera, el resultado de octubre “depende de cómo se desarrolle la campaña”. Eso se va a ir construyendo en estos 4 meses y “depende de la química que haya entre el líder y la gente”.

En ese sentido indicó que “la figura política más popular del país, después del presidente, es Mujica” y la diferencia en términos de popularidad que separa a Mujica de Lacalle “hasta hace un año era enorme y ahora es modesta”.

La polvareda se va asentando

La prensa internacional cataloga a los tres candidatos a la presidencia de los partidos mayoritarios como hijo de un ex dictador en referencia a Bordaberry, ex guerrillero en relación a Mujica y ex presidente en cuyo gobierno se denunciaron casos de corrupción cuando se refiere a Lacalle. Sobre esas consideraciones Luis Eduardo González analizó que “es muy difícil resumir concisamente lo que pasa en un país al que nadie conoce” y en cuanto a la ciudadanía uruguaya señaló que tiene una característica muy positiva que es creer en la redención.

En el caso de Bordaberry “es información irrelevante, no conozco a nadie que sostenga que Bordaberry es responsable de los pecados de Juan María. Eso es un absurdo, particularmente cuando el hijo jamás tuvo una confusión en algún momento en materia de ideas y principios”.

Sobre Mujica resumió que dejó de ser guerrillero hace muchos años. “En todo caso los pecados fueron políticos y pero pagó al contado”. Además dijo que toda la agrupación “lenta pero persistentemente renunció a la lucha armada, se incorporó al Frente y comenzó a hacer política activa y democrática. Todo el mundo tiene claro que hace muchos años Mujica se dedica a esto”.

En cuanto a Lacalle dijo que “hay que distinguir las imágenes de los hechos. Algunos personajes de su gobierno tuvieron que pagar culpas y los echaron directamente del Partido Nacional” pero “nunca hubo una acusación concreta contra Lacalle. En su momento las imágenes eran bastante más escandalosas pero a medida que la polvareda se va asentando, la gente va siendo más cautelosa. Los blancos hace mucho tiempo que no le dan importancia a eso. Y esa imagen se está extendiendo al resto de la población”.

“Los uruguayos incluso los adversarios políticos tienen la capacidad de tomar las cosas en perspectivas con respecto a esas figuras. Si había pecados, el hombre los sabe superar”. La capacidad de redención de la ciudadanía va más allá del perdón, es “mirar en perspectiva” y eso permite “alejarse de la carga del pasado e ir hacia un futuro diferente. Sin esa capacidad los uruguayos nunca hubieran hecho que Mujica fuera el primer senador de la lista más votada o nunca hubieran permitido que Lacalle compitiera con chance”.

Montevideo Portal / Patricia Sabelin