Censo en Argentina: tuvo que censar la casa de la ex de su marido y se llevó una paliza

Esta semana se está llevando a cabo en Argentina un censo general poblacional, conteo demográfico que, desde 198, el vecino país efectúa cada diez años.

En ese marco se produjo un episodio violento y anecdótico a la vez, que alcanzó las páginas de la prensa local.

El hecho ocurrió en la ciudad de las Lajitas, en la provincia de Salta, y tuvo como víctima a una funcionaria del Instituto Nacional de Estadística y Censos de la República Argentina (INDEC), afectada a las labores de censo.

Según informa el periódico local El Tribuno, la trabajadora, de 29 años, llamó en una casa y fue atendida por dos hombres, padre e hijo, quienes la hicieron pasar con toda amabilidad. Mientras la censista hacía su trabajo, entró en escena una mujer, quien tiempo atrás había sido pareja del actual esposo de la funcionaria.

"Ahora sí te voy a cagar matando", gritó la mujer, quien se abalanzó sobre la visitante y la emprendió a golpes, ataque al que se sumó su hermana. Finalmente, la intervención de los hombres antes mencionados puso fin al violento episodio.

La censista abandonó corriendo el lugar y llamó a emergencias. Hasta el lugar llegó un móvil policial que la trasladó hasta el hospital zonal, donde le diagnosticaron "labio inferior inflamado, en mucosa yugal infiere pequeña laceración, excoriación superficial en dedos anulares derecho e izquierdo".

La trabajadora radicó denuncia penal contra las hermanas por "lesiones y amenazas", y las denunciadas presentaron a la vez su propia denuncia, en el entendido de que la agredida no podía acercarse a la vivienda por una orden de restricción existente a raíz del problema conyugal suscitado hace algunos años. Ahora la Justicia deberá determinar las acciones legales a seguir.

OTRO CASO

Mientras tanto, en la provincia de Buenos Aires, otra censista resultó lesionada mientras hacía su trabajo.

Según informara el matutino porteño Clarín, tres funcionarias se presentaron en una casa en Villa Udaondo, donde fueron recibidas por una adolescente de 16 años. Una vez en la casa, una de las censistas pidió permiso para pasar al baño, cosa que le fue permitida.

En ese momento n joven, pareja de la adolescente, salió de un dormitorio y recriminó a la menor por haber franqueado el paso a las trabajadoras.

"¿Por qué las dejaste entrar, no ves que nos pueden robar?", fritó el joven que, fuera de sí, tomó un vaso de vidrio y lo arrojó contra su novia. Sin embargo, el objeto impactó contra la trabajadora que había ido al baño, y que acertó a salir justo cuando el recipiente surcaba el aire.

El vidrio "le produjo un corte y debió ser atendida en un hospital", informaron fuentes judiciales al medio regional Primer Plano Online.

La Justicia intervino luego de que tomó conocimiento del episodio y el joven fue demorado. Como su intención fue agredir a su pareja -y no a la censista- se le abrió una causa por violencia de género, y quedó detenido unas horas.