Ubicada frente al mar, la torre sur del complejo Champlain Towers se derrumbó sobre la 1:00 horas de la madrugada del 24 de junio. Un video de vigilancia registró el desplome en segundos.
Una de las rescatistas, Maggie Castro, del Departamento de Bomberos de Miami-Dade, dijo que las "personas probablemente estaban en la cama cuando sucedió", por lo que es poco probable encontrar a muchas a la vez. "Parece lento, pero estamos avanzando lo más rápido posible", aseguró a la AFP.
Asimismo, la agencia AFP informa que el nieto de una pareja de desaparecidos, Arnie y Myriam Notkin, dijo que su familia recibió 16 llamadas desde el teléfono fijo de sus abuelos, aunque solo escucharon ruido de estática.
"Estamos tratando de comprender lo que está pasando", dijo Jake Samuelson al noticiero Local 10, sin saber si las llamadas eran de sus abuelos o si se debían a una falla mecánica. Las últimas fueron el viernes.
Dos enormes grúas y perros rastreadores ayudaban en los esfuerzos de búsqueda y rescate. Los socorristas cavaron una enorme trinchera a través de la montaña de hormigón y hierro retorcidos y todo escombro con "valor forense" estaba siendo llevado a un gran depósito para ser inspeccionado.
"Habrá una investigación minuciosa y completa sobre los motivos que llevaron a esta tragedia", prometió Levine Cava. Un informe sobre el edificio había señalado ya en 2018 "daños estructurales importantes", así como "grietas" en el sótano, según documentos publicados el viernes.
"La impermeabilización debajo de los bordes de la piscina y la vía de acceso para vehículos (...) ya superó su vida útil y por lo tanto debe ser retirada y reemplazada por completo", escribió en este documento el experto Frank Morabito, pidiendo reparaciones "dentro de un tiempo razonable", sin señalar un riesgo de colapso. Las reparaciones en el edificio, construido en 1981, estaban programadas y se habían comenzado obras en el techo.
Una carta de alerta
La construcción sufría un "deterioro" que se "aceleraba", alertó en abril el presidente de su asamblea de copropietarios en una carta que varios medios estadounidenses dieron a conocer este martes.
Era necesario invertir unos 15 millones de dólares en obras para ajustar a la normativa el edificio que se desplomó en medio de una nube de polvo el jueves en la ciudad de Surfside, según una estimación del condominio.
Según una carta fechada el 9 de abril, dirigida a la asociación de copropietarios por su presidenta, Jean Wodnicki, la situación se agravaba. Desde 2018 "el deterioro del hormigón se ha acelerado, el estado del techo ha empeorado considerablemente", alertó Wodnicki en la misiva.
Ese año, un informe sobre el estado de la lujosa construcción había señalado ya "daños estructurales importantes", así como "grietas" en el sótano del edificio, según documentos publicados por el gobierno de Surfside.
"La impermeabilización debajo de los bordes de la piscina y la vía de acceso para vehículos (...) ya superó su vida útil y por lo tanto debe ser retirada y reemplazada por completo", escribió en este documento el experto Frank Morabito, pidiendo reparaciones "dentro de un tiempo razonable", aunque sin mencionar riesgo de colapso.
"Habrá una investigación minuciosa y completa sobre los motivos que llevaron a esta tragedia", dijo el lunes la alcaldesa del condado de Miami-Dade, Daniella Levine Cava.
Con información de AFP