Carlos III recordó a su madre en su primer discurso como rey: “Ella era una inspiración”

Un día después de que su madre, la reina Isabel II del Reino Unido falleciera, el nuevo monarca, Carlos III, dio su primer discurso como soberano, en una transmisión en vivo desde el Palacio de Buckingham, en Londres. 

“Les hablo a ustedes con un profundo sentimiento de tristeza. A lo largo de su vida, Su Majestad la reina fue una inspiración, un ejemplo para mí y para mi familia”, comenzó diciendo el monarca. 

Dijo que la vida de su madre fue una “bien vivida” y una “promesa con el destino” que cumplió debidamente. 

“Esa promesa de servicio de por vida es la que hoy renuevo a todos ustedes. Junto a mi duelo personal, y el de mi familia, también compartimos con ustedes, en el Reino Unido, en los otros países donde la reina fue jefa de Estado, en la Mancomunidad de Naciones (Commonwealth of Nations, en inglés), y alrededor del mundo, un profundo sentido de gratitud por los más de 70 años en los que mi madre, como reina, sirvió a los pueblos de tantas naciones”, expresó. 

Carlos recordó el juramento hecho por su madre, en su vigésimo primer cumpleaños, desde Ciudad del Cabo (Sudáfrica) a la Mancomunidad, en la que prometió dedicar su vida, “así fuese corta o larga”, al “servicio de su gente”. 

“Fue un profundo compromiso personal que definió su vida entera. Ella hizo sacrificios por deber. Su dedicación y devoción como soberana nunca menguó, en tiempos de cambio y progreso, en tiempos de alegría y celebración, y en tiempos de tristeza y pérdida”, destacó el rey. 

“En su vida de servicio, vimos ese perdurable amor por la tradición, junto a su intrépido abrazo al progreso, que nos hacen grandes como naciones. El cariño, la admiración, y el respeto que inspiraba se convirtieron en un sello distintivo de su reinado. Y, como cualquier miembro de mi familia puede atestiguar, combinó estas cualidades con calidez, humor y una habilidad infalible para ver lo mejor en las personas”, recordó. 

“Así hizo como la reina, con su inquebrantable devoción, ahora yo también juro solemnemente que, durante el tiempo restante que Dios me dé, defender los principios constitucionales que están en el corazón de nuestra nación”, prometió. 

Se refirió al tiempo de cambio que está viviendo su familia, y destacó que cuenta con el amor y ayuda de su esposa Camila, a quien, “en reconocimiento de su leal servicio público” llevado a cabo desde que se casaron hace 17 años, nombró reina consorte. 

El monarca anunció que su hijo mayor y heredero, Guillermo, que con la muerte de su abuela asumió los títulos escoceses de su padre, así como el ducado de Cornualles, ahora fue nombrado príncipe de Gales, como título oficial. “Ese con el cual yo fui tan enormemente privilegiado durante tanto tiempo de mi vida y deber”, sostuvo. 

“Con Catalina a su lado, nuestro nuevos príncipe y princesa de Gales, inspirarán y liderarán nuestras conversaciones nacionales, ayudando a traer lo marginal al escenario central, donde la ayuda vital puede ser dada”, afirmó el soberano británico.

“También quiero expresar mi amor a Enrique y Meghan, mientras continúan construyendo su vida en el exterior”, dijo, en referencia a su segundo hijo, el duque de Sussex, y su esposa, que viven en Estados Unidos.

“En unas semanas, nos reuniremos todos como nación, como Mancomunidad y como comunidad global, para despedir a mi amada madre en su descanso. En nuestro duelo, recordemos y tomemos fuerza de la luz de su ejemplo”, invitó. 

Al final de su discurso, agradeció por última vez a su madre. 

“A mi querida mamá, mientras comienzas tu último gran viaje para reunirte con mi querido papá, quiero decirte simplemente esto: gracias. Gracias por tu amor y devoción a tu familia y a la familia de naciones que serviste tan diligentemente estos años”, concluyó.