El secretario de Relaciones Económicas Internacionales de la Cancillería, Jorge Neme, aseguró este jueves que para Argentina el Mercosur es "su pasado inmediato, su presente, su futuro y la base de un proyecto de integración sudamericana", que entiende se debe construir como "base de un desarrollo común, económico y social".
"Eso se logra con más Mercosur, como plantean el presidente Alberto Fernández y el canciller Felipe Solá. Somos receptivos y tenemos una mirada amplia, pero para nosotros las reglas del consenso son inmodificables. Es lo mejor para la región y para el bloque", aseguró.
Neme detalló la postura del país vecino sobre la agenda de relacionamiento externo del bloque: "Hemos demostrado desde que asumimos en diciembre del 2019 no hubo ningún palo en la rueda en ningún proceso de negociación de parte de Argentina. Hemos colaborado, ayudado y discutimos, por ejemplo, con la Unión Europea en primera línea, para firmar ese acuerdo cuyas dificultades hoy están en la UE".
En tal sentido, puso de ejemplo la discusión que dio Argentina en abril de 2020 cuando se abrió la posibilidad de negociar con Corea del Sur. "Se planteó un debate sobre la negociación con Corea, dijimos que no queríamos ser un obstáculo para los demás países que querían acelerar y que en el marco de la pandemia había un panorama de incertidumbre económica global y que por esto no era conveniente avanzar", explicó.
"En segundo lugar, dijimos que Argentina tenía algunos problemas con Corea, no estrictamente en la negociación comercial, pero sí en cuestión fitosanitaria, por ejemplo, en el ingreso de nuestra carne. Argentina exporta carne a más de 100 países. En el caso de Corea tiene una política restrictiva al ingreso de productos agrícolas y nosotros no teníamos espacio para negociar con ellos un acuerdo favorable. Propusimos a nuestros socios: sigan con el capítulo bienes, y nosotros con servicios e inversiones, y al final acompañamos como un acuerdo en el marco del Mercosur", añadió.
Consultado sobre la postura de Uruguay, quien advirtió en una reunión de ministros de Relaciones Exteriores del Mercosur que comenzaría conversaciones por acuerdos bilaterales extrazona, Neme dijo que cuando Uruguay entró al bloque, Argentina y Brasil "venían de un proceso de integración revitalizado por Sarney y Alfonsín" y que posteriormente se firmó el protocolo Ouro Preto, acuerdo que sentó las bases del funcionamiento jurídico del Mercosur.
"Esto quiere decir que, como dijo Alberto Fernández, las negociaciones se inician en bloque y terminan en bloque. Este tipo de tratados tienen ventajas y limitaciones. Uruguay tiene que tomar una decisión política. La regla del consenso es una regla establecida claramente en todo el cuerpo jurídico constitutivo de los tratados que rigen el Mercosur", expresó.
Asimismo, consultado sobre el potencial acuerdo entre Uruguay y China, Neme aseguró: "No tiene sentido hablar de estas cosas como hipótesis ni incrementar el nivel de pólvora verbal porque no existe. Cuando exista vamos a ver si es bueno, lo analizaremos y ver si se puede adecuar a la norma del Mercosur. Primero hay que llegar a ese acuerdo. Es mucho más interesante negociar desde el Mercosur un acuerdo con cualquier país del mundo. Como países hermanos, debemos poner en claro acuerdos, diferencias y conversar fraternalmente. Estamos convencidos de desarrollar una agenda común. Los puntos de desencuentro nos afectan a todos. Hay voluntad de parte de la Argentina. Están dadas todas las condiciones para abrir un diálogo fraterno para superar las dificultades".
"El Mercosur es beneficioso para todos los países más allá de que debe crecer nuestro comercio. Tenemos una enorme capacidad productiva para desarrollar, con un conjunto de bienes y servicios que producimos nosotros mismos, que va desde maquinaria agrícola y biotecnología a energías renovables. Tenemos una enorme expertiz que forma parte de un proyecto de desarrollo regional que no abarca sólo al Mercosur sino todo el continente", subrayó.
Por último, sobre la reciente elección en la CAF, Banco de Desarrollo de América Latina, Neme afirmó: "Lamentamos que no nos hayan acompañado los socios del Mercosur porque con esos votos hubiésemos obtenido la presidencia no para la Argentina sino para la región y el bloque. Y hubiésemos tenido para la región la titularidad de un banco de inversión que tiene mucho que ver con las obras de infraestructura, de transporte a energía, así que creo que con eso perdimos todos. Aun así, logramos vicepresidencia importante. La CAF no es de izquierda ni de derecha, tiene recursos de inversión para una región que tienen una deuda en esa materia; y el Mercosur no tiene una cabeza en un banco de inversión desde que Enrique Iglesias dejó la presidencia del BID hace 15 años. Hemos perdido una generación sin lograr esto. Fue una lamentable decisión".