En las últimas horas se procedió a la autopsia de los dos cuerpos hallados en un pozo a 150 centímetros de profundidad en la zona de Chihuahua, en la costa de Maldonado.

Tal como informáramos, los cadáveres se encontraban en avanzado estado de descomposición, y hay varios indagados por su presunta implicación en el doble crimen.

En cuanto a la autopsia en cuestión, el forense Sergio Mozzo dijo a la emisora puntaesteña FM Gente que los cadáveres habían sido cubiertos con cal viva, procedimiento que acelera el deterioro de los cuerpos y, en este caso, impidió establecer las causas de ambas muertes. Pese a ese impedimento, sí pudo establecerse que los decesos datarían de hace unos diez días.

Los técnicos forenses extrajeron muestras de ADN en procura de identificar a los occisos —un hombre y una mujer, maniatados y envueltos en tela— y efectuarán nuevas pericias con el fin de obtener la información que no fue posible saber mediante la autopsia.

La policía dio con el paradero de los restos luego de obtener información precisa al respecto, en el marco de una investigación relacionada a drogas y hurtos.

Una de las hipótesis que se procura confirmar o descartar supone que uno de los cadáveres sea el de Milton Gustavo Vázquez Rodríguez, de 48 años, que está desaparecido desde el pasado jueves 9 de febrero y cuya ausencia se reportó en un parte policial el día 13.

De acuerdo con el citado medio, el otro cadáver sería el de una mujer adicta a las drogas, que también ejercía la prostitución y acompañaba con frecuencia a Vázquez.

La crónica agrega la denuncia del hermano de Vázquez, quien asegura que la casa de este fue robada varias veces después de su desaparición, hechos que acabaron con el competo desvalijamiento de la finca. También fue robado el auto del dueño de casa, vehículo que apareció en la vía pública días después.

Fue precisamente durante las investigaciones de estos delitos que se obtuvo información sobre los cuerpos sepultados.