El directorio de la Caja de Profesionales sigue buscando la mejor fórmula para lograr el financiamiento del organismo y saldar el déficit que mantiene. En un desayuno llevado adelante este viernes, la presidenta, Virginia Romero, consideró que la Caja precisa “una reforma urgente”. 

Para eso se trabaja “en una ley exprés”, diferente a la presentada al Poder Ejecutivo, que buscará cambios paramétricos entre los que se encuentran: modificar la edad de jubilación llevándola de 60 a 65 años, aumentar el promedio del sueldo básico jubilatorio, reducir la tasa de reemplazo y subir de 10 a 15 las categorías aportantes. 

La Caja buscará cómo hacer estos cambios de forma paulatina, y también el directorio prevé evaluar los impactos de estas transformaciones. “Necesitamos una reforma estructural. Las remuneraciones son diferentes, porque hay muchas más carreras que antes y hay un colectivo de profesionales muy heterogéneo”, agregó Romero. 

Según especificó la presidenta, esta iniciativa exprés será presentada lo antes posible al Parlamento.