El historiador y politólogo Gerardo Caetano fue entrevistado este viernes en el programa Nada que perder, emitido por M24, en un ciclo de programas con motivo de los 20 años de la tristemente recordada crisis del año 2002.
Durante el reportaje, Caetano recordó que Jorge Batlle, presidente del Uruguay a la sazón, apostaba por un “ajuste liberalizador y capitalista” y aseguró que dentro de la actual coalición de gobierno “muchas ideas son prácticamente las mismas” que entonces.
Pese a atales similitudes, hay diferencias marcadas por el paso del tiempo y la evolución política.
“La modalidad no puede ser la misma, hoy hay consejos de salarios, a nadie se le ocurre quitarlos cómo en 1991”, ejemplificó.
Posteriormente, Caetano pasó revista a algunas de las peores consecuencias de aquella crisis. Por ejemplo, la pobreza trepó al 39,9% y hundió a un millón de personas. También se disparó la cifra de emigrados, que llegaron a ser unos 100.000.
En ese momento, con “una calidad del empleo terrible”, Uruguay “debió enfrentar una situación crítica sin Consejos de Salarios”, rememoró.
Asimismo, explicó que la debacle dejó en evidencia carencias en el Estado, como la falta de un Ministerio de Desarrollo Social, cartera que se crearía más tarde, durante el primer gobierno frenteamplista.
Caetano recordó la convicción del difunto presidente Batlle, quien aseguraba “que no había mejor política social que una mejor política económica”, en el entendido de que “no eran necesarias políticas sociales, lo que había que hacer era atraer inversión extranjera directa y eso iba a derramar”, algo que, entiende, no sucedió.
“Quien dijo eso terminó con un millón de pobres”, expresó.
Volviendo ala actualidad, el historiador indicó que el gobierno presidido por Lacalle Pou “no tiene margen para aplicar un proyecto tan ciegamente neoliberal como el que se quería aplicar por entonces” porque “hay pautas de regulación financiera” que no lo permiten.