Cada menos de dos horas se registra un caso de violencia infantil; en 2019 hubo 4774

En el marco del Día Mundial de Lucha contra la Violencia hacia Niñas, Niñas y Adolescentes, se presentó el informe de Gestión Sistema Integral de Protección a la Infancia y a la Adolescencia contra la Violencia (SIPIAV) 2019 en la sede del INAU.

El evento contó con la presencia de autoridades nacionales e institucionales, técnicos y operadores de territorio.

Durante el 2019 se intervino en un total de 4774 situaciones de maltrato y/o abuso sexual hacia niños, niñas y adolescentes; esto implica la intervención en 13 situaciones por día (una situación cada 1:50hrs). Respecto al total de situaciones atendidas continúa el incremento que se viene registrando año a año, según el informe.

Se continúa con el crecimiento constante de situaciones en las que se interviene, aumentando en el 2019 un 16% respecto al año anterior. El crecimiento que se registra, desde el año 2011, no implica un aumento de las situaciones de maltrato y/o abuso sexual hacia niños, niñas y adolescentes; sino un aumento en la capacidad del sistema de captación, intervención y registro de los casos; lográndose la interrupción de la violencia y restauración de derechos en todos ellos.

Según indica el Informe de Gestión 2019, los tipos de violencia son variados: el mayor porcentaje fue de maltrato emocional (32%), seguido de abuso sexual (24%), maltrato físico y negligencia (22%) respectivamente.

"El 56% de las intervenciones correspondieron a niñas y adolescentes (de sexo femenino), y un poco más de la mitad (56%) tenían menos 12 años de edad. Particularmente el 17% tenía entre 0 y 5 años", informó la Coordinadora de SIPIAV María Elena Mizrahi.

"Por otra parte, se intervinieron más de 1100 casos de abuso sexual (más de 2 por día)", sostuvo Mizrahi.

"3 de cada 4 casos fueron de sexo femenino. Del total de niños y niñas con menos de 5 años, el 32% sufrió abuso sexual", agregó.

La mayoría de estas situaciones fueron crónicas y recurrentes, presentando el 60% de niños, niñas y adolescentes diversas dificultades para visualizarse en las situaciones de violencia. Las niñas y adolescentes mujeres logran poder visualizar más que los varones el maltrato, por lo que es importante trabajar en las nuevas masculinidades.

Además, el 91% de las personas agresoras correspondieron a familiares directos o integrantes del núcleo de convivencia. De estas situaciones detectadas, en 3 de cada 4 se incluyó a la familia en los procesos.

A continuación podés leer el informe completo:

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