La Confederación de Organizaciones de Funcionarios del Estado (COFE) emitió un comunicado de prensa este lunes en referencia a los hechos de los últimos días acerca del caso Marset.
Estos “gravísimos hechos” conforman “el peor momento” del gobierno desde que inició, ya que en menos de 48 horas renunciaron dos ministros, un subsecretario y el principal asesor del presidente en materia de estrategia comunicacional, sostienen desde la agrupación.
“Esto claramente no es una cuestión de percepción ni de animosidad, es un dato objetivo de la realidad, que difícilmente pueda minimizarse, más allá de los intentos del presidente por matizar la conferencia de prensa con alusiones a su viaje a Estados Unidos o al Hospital del Cerro. Habría que revisar la historia de los gobiernos democráticos para encontrar antecedentes de tantas remociones de jerarcas. Sin dudas es una mala imagen del gobierno”, dice COFE.
En el comunicado sostienen que, “infelizmente”, no es el primer escándalo que afecta a este gobierno, ni son los primeros jerarcas que renuncian, pero en este caso particular se trata de un hecho que “compromete a la institucionalidad en sí misma”.
El presidente Luis Lacalle Pou anunció este sábado que aceptó las renuncias de su asesor de comunicación, Roberto Lafluf; el ministro del Interior, Luis Alberto Heber; y el subsecretario del Interior, Guillermo Maciel. Las decisiones del mandatario generaron gran cantidad de críticas, principalmente del Frente Amplio, que realizó una conferencia de prensa este domingo al respecto, encabezada por su presidente, Fernando Pereira.
“Los hechos que han motivado estas bajas, si bien pueden parecer confusos, son lo suficientemente irregulares como para tener que ser analizados por el sistema de Justicia”, señala el comunicado de COFE.
El sindicato afirma que Heber y el exministro de Relaciones Exteriores Francisco Bustillo, quien renunció el miércoles, “tendrán que rendir cuentas ante la Justicia debido a que se presume que han mentido, tanto en el Parlamento como frente a la opinión pública, y, al mismo tiempo, habrían intentado ocultar o hacer ocultar evidencia que les comprometería”.
“Sea como sea, mañana nuevamente ocuparemos las portadas de los principales medios de comunicación regionales e internacionales por hechos con visos de corrupción”, concluye COFE, en referencia a la repercusión internacional de esta crisis.