Cristina Fernández alegó pidiendo nulidad del caso del pacto con Irán: "Esta acusación es un disparate".
La vicepresidenta argentina habló en audiencia pública del caso en el que se la acusa de encubrir a los sospechosos del ataque a la AMIA
El día en el que se conmemoran 27 años del atentado contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner alegó en una audiencia pública para pedir la nulidad de la cauda por la firma del pacto entre el vecino país e Irán, en la que se la acusa de encubrir a los sospechosos del ataque terrorista.
Fernández, de manera virtual y desde su despacho en el Congreso, expuso los argumentos en los que se basa su defensa para pedir que se anule el caso elevado a juicio donde se la acusa de "encubrimiento agravado" del atentado contra la organización judía.
"Nos acusan de ser encubridores del máximo atentado que sufrió nuestro país", dijo la expresidenta, aseverando que la idea es "desde la más simple lógica del disparate judicial, institucional y político que es esta acusación".
"Cuando sucedió el atentado de la AMIA, Andrés Larroque tenía 17 años cuando ocurrió el atentado de la AMIA. Juan Martín Mena era más chico aún, debería estar cursando algún curso de la escuela. Oscar Parrilli, quizás hasta tenía pelo, había perdido la interna justicialista y se había acercado al Frepaso (Frente País Solidario). Carlos Zannini era Ministro de Gobierno de Néstor Kirchner que atravesaba su primera gobernación. ¿Dónde estaba yo? Sentada en alguna banca en la legislatura de la provincia de Santa Cruz. No teníamos ningún contacto, y esto no es menor", dijo Fernández nombrando a los políticos kirchneristas acusados de encubrimiento en la denuncia presentada por el fiscal Alberto Nisman cuatro días antes de aparecer muerto el 18 de enero de 2015.
La vicepresidenta afirmó que la causa AMIA se había convertido en "un tablero de ajedrez de la política local e internacional" y que desde su inicio se buscó usar el caso para los juegos políticos. "La impunidad es el manejo político de la causa", afirmó, recordando del lema usado este año por los familiares y víctimas del atentado: "Conectados contra la impunidad".
La expresidenta argumentó que la causa del Pacto con Irán debe anularse porque fue armada por el gobierno de Mauricio Macri con la ayuda de jueces allegados. El kirchnerismo había denunciado que dos de los jueces de la Cámara de Casación que intervinieron en el caso, Mariano Borinsky y Gustavo Hornos, visitaron a Macri en las residencias presidenciales durante su mandato.
En la audiencia, Fernández afirmó que cuando a los jueces de primera instancia "se les escapaba algo", los de Casación estaban para darle "lo que ellos creerían que era mi merecido".
Apuntando contra su sucesor en la Casa Rosada, la expresidenta argentina dijo que Macri "buscó manejar la justicia para usarla como instrumento de persecución contra la dirigencia política" desde que asumió la dirigencia del Poder Ejecutivo. Fernández dijo que durante el gobierno de Cambiemos, tanto ella como su familia, exintegrantes de su gabinete y otros políticos kirchneristas fueron "víctimas de una feroz persecución", argumentando que se utilizaron organismos como la Oficina Anticorrupción y la Unidad de Información Financiera para "perseguir de forma impropia y anómala".
CFK apuntó también contra los jueces que llevan las siete causas de corrupción por las que está acusada. "Se ponen a dedo jueces que hacen todo tipo de cosas, que firman lo que sea" dijo, afirmando a su vez que "en esta causa se intentó poner un Tribunal Oral a dedo, esto afortunadamente fue abortado por la Corte Suprema, pero iba a constituir uno de los mayores escándalos judiciales de los que se tenga memoria, como este de hoy".
"Todavía me cuesta creer que a 27 años de la tragedia de la AMIA estemos todavía discutiendo esto que es el montaje de una mentira para poder ganar elecciones, para poder mantener entretenida a la gente y para poder echarle la culpa a los que mal o bien, con equivocaciones, con aciertos, podemos decir que cuando nos tocó gobernar la argentina, la gobernamos para que la gente pudiera vivir mejor", concluyó, culminados los 45 minutos de los que disponía para hacer su intervención.