En un reciente decreto, el Poder Ejecutivo cambió el criterio para ajustar el valor de la Base de Prestaciones y Contribuciones (BPC). Habitualmente, hasta el año pasado se ajustó la BPC por el Índice de Precios del Consumo (IPC), es decir, la inflación, pero el gobierno decidió que este año se modificará por el Índice Medio de Salarios (IMS).
De haber hecho el ajuste por el método habitual, la BPC tendría que haber incrementado su valor en 9,41 %, pero al haberlo hecho por el IMS se ajustó un 7,76 %. Como el Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF) y el Impuesto de Asistencia a la Seguridad Social (IASS) tienen un mínimo no imponible que se ajusta, precisamente, por el valor de la BPC, al ajustarse por un valor más bajo ese mínimo no imponible crecerá menos de lo habitual.
Desde la oposición se criticó la medida como un "ajuste encubierto", debido a que con esta modificación más personas pagarán IRPF de lo que lo habrían hecho. Dos exministros de Economía, Mario Bergara y Danilo Astori, señalaron que la decisión del Gobierno incumple la promesa de no subir impuestos. "Se está agregando una clara violación de compromisos electorales, como los que se comprueban al verificar el importante incremento de la carga tributaria sobre la población, lo cual, por su naturaleza, castiga especialmente a los más débiles", señaló Astori en su columna en Montevideo Portal, mientras Bergara dijo también a Montevideo Portal que esto va "en dirección contraria" a las promesas de la coalición de gobierno en campaña electoral.
Otras voces
A las críticas se sumó el senador (suplente) frentista y exministro Eduardo Brenta, que dijo a Montevideo Portal que cambiar el criterio y ajustar por IMS hará que "personas que no pagaban empiecen a pagar y las que ya pagaban tengan que pagar más".
"Se va a ver reflejado en el cobro de las jubilaciones. El resultado es un aumento de la recaudación del Estado", dijo, tras aclarar que la diferencia del monto mínimo no imponible podría haber sido de 34.610 pesos en lugar de 34.090.
"Luego de años de criticar IRPF y hasta de promover su eliminación y la del IASS no solo no lo hacen sino que lo calculan de una manera que perjudica al trabajador", afirmó. Señaló que esta modificación se suma al aumento del IVA en el pago con tarjeta y lo aprobado en el presupuesto para trabajadores, "que es una rebaja salarial a los públicos; ni siquiera se incorporó al artículo la recuperación del salario real".
"No hay ninguna certeza de que el salario real se recupere en el quinquenio. No hay ningún criterio que diga cómo se empezará a devolver en el 2022, 2023 y 2024. La evolución muestra también que hay una caída del salario privado, junto al crecimiento del desempleo y quienes están en el seguro de paro parcial, muchos d ellos cuales no recuperarán el trabajo", apuntó.
"No hay organismo internacional que no reclame que los Estados inviertan aún a costo del aumento del déficit", dijo, recordando que la inversión de Uruguay en la pandemia está a nivel de los países más pobres del mundo. "Vemos que hay una política económica del Gobierno que en vez de ser anticíclica, en un proceso de decrecimiento, afecta los ingresos fijos y profundiza el impacto negativo que ya tiene la crisis", opinó Brenta.
"Vamos directo, de cabeza, a una profunda crisis económica en medio de la incertidumbre de la pandemia y en medio de una fuerte incertidumbre respecto a la situación económica y social del país", apuntó Brenta. Agregó que le llama la atención que, teniendo recursos como el Inefop -cuyos fondos no son del Estado- no haya políticas activas vinculadas al empleo. "Si hubo políticas fuertes cuando la economía crecía, ahora, cuando muchos trabajadores están en la casa sería un momento ideal para que quienes están en el paro aprovechen para recalificarse en función de cada sector", reflexionó.
En la línea de Bergara y Astori, opinó que los cambios en el IRPF son "un claro incumplimiento de los compromisos de campaña". "Es mentira que no iban a subir los impuestos. Lo hacen en forma velada pero al que dude que mire el recibo de sueldo o la jubilación. Se va a dar cuenta de que va a cobrar menos que lo que cobraba", dijo.
Brenta expresó que le gustaría ver si el Gobierno atiende la demanda de Guido Manini Ríos, que pidió invertir 2500 millones de dólares (lo manifestó en realidad en puntos de PBI) para atender a personas y empresas. "Nosotros venimos planteando desde marzo medidas y no hablamos de rentas básica, sino veinte cosas diferentes, como apoyos a PYMES con créditos blandos o sin costos. Se han planteado muchas medidas en el documento entregado a Lacalle y en la discusión parlamentaria, que el Gobierno ha desconocido completamente. Veremos qué hace el Gobierno con su uno de sus principales socios, si lo atiende o continúa con las políticas restrictivas que van a hacer que a Uruguay le cueste más salir de la crisis", concluyó.