Brasil registró 966 nuevas muertes por covid-19 en las últimas 24 horas, con lo que superó los 567.000 fallecidos, en momentos en que el número de víctimas por la pandemia continúa a la baja, informó este viernes el Gobierno.
De acuerdo con el más reciente boletín del Ministerio de Salud, Brasil acumula 567.862 muertes por el virus desde el inicio de la pandemia, en febrero del año pasado, mientras que el número de contagios llegó a los 20.319.000 casos confirmados, tras la notificación de 33.953 nuevos positivos este viernes.
Brasil, con sus 212 millones de habitantes, es uno de los países del mundo más azotado por la pandemia del coronoavirus y se ubica como el segundo en número de fallecidos, detrás de Estados Unidos, y el tercero en cantidad de contagios, después de EE.UU. e India.
Según los datos del Ministerio de Salud, de los casi 20,3 millones de brasileños contagiados por covid, unos 19,1 millones ya se recuperaron y fueron dados de alta, lo que equivale al 94,4 % del total, y otros 577.221 continúan bajo cuidados médicos (2,8 %).
No obstante, los avances de la campaña de vacunación, que empezó a cuenta gotas a mediados de enero pero se ha intensificado en los últimos dos meses, reflejan una caída en las cifras, y los promedios de la última semana se ubicaron este viernes en los 871 fallecidos y los 30.036 positivos diarios.
Desde hace dos semanas, los promedios diarios de muertes se encuentran por debajo de las 1.000 víctimas, una cifra bastante menor a la media máxima registrado el 12 de abril (3.124 muertes por día).
Lo mismo ocurre con la media diaria de contagios, que desde comienzos de agosto se mantiene por debajo de los 35.000 casos diarios, casi la mitad del récord registrado el 24 de junio pasado (77.328).
Hasta el momento, Brasil ha aplicado la primera dosis de la vacuna a un 51 % de su población y el 22 % de sus habitantes ya cuentan con el esquema completo de inmunización.
Las principales regiones del país, como Sao Paulo, el estado más poblado de Brasil con unos 46 millones de habitantes, o Río de Janeiro, el más turístico y que alberga a unos 17 millones de habitantes, tienen como meta aplicar la primera dosis a todos los mayores de 18 años en agosto, de forma que toda la población adulta esté inmunizada con la carga completa en noviembre.
Sin embargo esta semana se han registrado algunos problemas en la distribución de los antígenos que han obligando a suspender las inmunizaciones en Río de Janeiro por dos días, aunque ya volvió a retomarlas hoy.
La "cidade maravilhosa" quiere acelerar al máximo las inmunizaciones para enfrentar el avance de la variante delta pues es el epicentro en Brasil de esta variante, que suma cerca de 600 casos comprobados genéticamente en el país.
Con información de EFE