Brasil se ofreció este martes a “acoger” a los más de 300 opositores y críticos con el Gobierno del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, despojados de su nacionalidad en las últimas semanas, en una reunión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU (Organización de las Naciones Unidas), en Ginebra.
“El Gobierno de Brasil recibió con extrema preocupación la decisión de las autoridades nicaragüenses de privar de su nacionalidad a más de 300 ciudadanos nicaragüenses”, indicó el representante brasileño, el diplomático Tovar Nunes, en su intervención, divulgada por la Presidencia.
Por ello, en línea con su “compromiso humanitario con la protección de los apátridas”, Brasil se puso a disposición para “recibir a los afectados por esa decisión”, amparado “en el estatuto especial previsto en la ley brasileña de migración”.
Esa ley permite a los apátridas residir en Brasil y, después de regularizar su situación migratoria, también les faculta a solicitar la nacionalidad brasileña.
El representante brasileño en la ONU denunció las “graves violaciones a los derechos humanos” en Nicaragua, lo que supone la manifestación más firme en este sentido desde que Luiz Inácio Lula da Silva asumió la Presidencia el pasado 1º de enero.
“El Gobierno brasileño acompaña los eventos de Nicaragua con gran atención y está preocupado con los reportes de graves violaciones a los derechos humanos y de restricciones al espacio democrático en dicho país, en particular con las ejecuciones sumarias, las detenciones arbitrarias y las torturas de disidentes políticos”, señaló Nunes.
Asimismo, se ofreció para explorar maneras de superar la crisis conversando con las partes “de manera constructiva”.
Las autoridades nicaragüenses han decidido retirar la nacionalidad “por traición a la patria” a tres centenares de ciudadanos críticos con la gestión del presidente Ortega, la mayoría de los cuales están en el exilio.
Este gesto del Gobierno llega después de las críticas recibidas por parte de la oposición, alineada con el expresidente Jair Bolsonaro, en relación con la falta de contundencia de Lula a la hora de condenar las violaciones de derechos humanos en Nicaragua.
“La manada de Lula calla contra el hombre dictador Ortega y no lo condenan en la ONU por los crímenes humanitarios que ha cometido y sigue cometiendo”, expresó en sus redes sociales el senador Ciro Nogueira, quien fue ministro de Presidencia en el Gobierno de Bolsonaro (2019-2022).
El también senador Flávio Bolonaro, hijo del líder ultraderechista, se sumó a las críticas al Partido de los Trabajadores (PT) de Lula por su postura frente a la grave situación en el país centroamericano.
“La ‘defensa de la democracia’ que repite el PT en las cuatro esquinas es solo discurso, la práctica es muy diferente…”, denunció en sus redes sociales.
EFE