En la mañana de este miércoles, policías militares realizaron un operativo contra el narcotráfico en una casona de la calle André Cavalcanti, en el centro de Río de Janeiro.
El operativo pudo haber sido rutina para los agentes, de no ser por la sorpresa que los aguardaba dentro de la finca: el lugar era regenteado por un niño de 12 años.
La Policía
Militar reveló que el menor de edad quedó “al frente del negocio” cuando sus
padres fueron arrestados por narcotraficantes. A partir de ese momento, el niño
no hizo más que continuar lo que sus progenitores habían iniciado.
Durante el operativo en la vivienda fueron incautados 59 fardos de marihuana,
780 piedras de crack y 170 chasquis de cocaína. Algunas de las sustancias
estaban escondidas en el techo de la casa.
Para el teniente coronel Marcelo Brasil, comandante del 5º BPM, la cantidad de crack retenido es clara demostración de que, en el centro de Río de Janeiro, esa droga es más consumida que las otras.
Según informara el portal noticioso G1, el fue traslado a dependencias policiales a la espera de que la Justicia decida su destino. Además de la gran cantidad de estupefacientes encontrados junto al niño, la policía también halló una pistola falsa de apariencia real.