El expresidente brasileño Jair Bolsonaro aseguró que “jamás” pasó por su cabeza dar un golpe de Estado. El anterior mandatario actualmente es investigado por la Corte Suprema de su país por “incitar” a sus seguidores a invadir violentamente las sedes de los tres poderes del Estado el pasado 8 de enero.
“Si quisiera dar un golpe, lo hubiera dado mientras era presidente, pero jamás pasó por nuestra cabeza”, afirmó el líder derechista en una entrevista a la cadena Jovem Pan desde Estados Unidos, en vísperas de su regreso a Brasil.
Bolsonaro había anunciado el fin de semana que regresará a su país este jueves 30 de marzo y luego de estar viviendo en Orlando, Florida, Estados Unidos, desde el 30 de diciembre de 2022, dos días antes de que asumiera su opositor Luiz Inácio Lula da Silva, como presidente de Brasil.
“Voy a trabajar en el Partido Liberal (...) recorrer Brasil y hacer política”, dijo Bolsonaro al informar de su regreso a la Record TV en Florida, en una entrevista publicada el jueves de madrugada.
“Mantener en pie la bandera del conservadurismo” en Brasil es la misión que se fijó el líder derechista.
Por su parte, su fuerza política, el Partido Liberal (PL) informó el viernes en redes sociales que el expresidente desembarcará en Brasilia el día 30 a las 7:30 (igual hora en Uruguay).
En sus declaraciones de este lunes, el exmandatario rechazó las críticas de la izquierda que le acusan de ser “problemático”, “no tener educación”, “decir palabrotas” y de ser un “dictador por querer dar un golpe”.
El Supremo Tribunal de Brasil incluyó al capitán retirado del Ejército en la lista de investigados por el intento de golpe de Estado perpetrado por miles de sus simpatizantes más radicales el pasado 8 de enero, en Brasilia.
Ese día, miles de bolsonaristas invadieron y destrozaron las sedes del Congreso, la Presidencia y el Supremo, con el objetivo de forzar la caída del actual presidente, Luiz Inácio Lula da Silva, que venció a Bolsonaro en las elecciones de octubre de 2022.
En el curso de las investigaciones, las autoridades encontraron un borrador de un decreto presidencial golpista en casa del exministro de Justicia de Bolsonaro, Anderson Torres, quien hoy sigue detenido por su presunta “omisión” en el episodio como secretario de Seguridad de Brasilia.
El texto, no firmado por Bolsonaro, habría permitido intervenir el Tribunal Superior Electoral (TSE) y anular el resultado de las elecciones.
En diversas ocasiones, Lula ha acusado públicamente al ex jefe de Estado de estar detrás de todo y “preparar” un golpe en su contra.
En otro momento de la entrevista, Bolsonaro confirmó que volverá a Brasil el jueves y dejó entrever que hará oposición al Gobierno de Lula.
“Estoy sin mandato, pero no estoy jubilado. Voy a reunirme con el Partido (Liberal, PL) y vamos a ver cuál es nuestra estrategia. No por el partido, sino por el país, de qué forma podemos presentarnos mejor para Brasil”, indicó, aunque garantizó no tener “ambición por el poder”.
El exgobernante volvió a usar la situación en Venezuela para atacar a los gobiernos de izquierda y advirtió que en Brasil "está en juego la libertad y el futuro económico" del país con Lula en el poder.
“La izquierda no va por el buen camino (...) Estamos entrando en un agujero del que puede ser difícil salir”, alertó, además de criticar el supuesto “adoctrinamiento en las escuelas” durante las administraciones del Partido de los Trabajadores (PT) de Lula.
Con información de EFE y AFP