El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, recibió este jueves al canciller Francisco Bustillo, el representante de Uruguay en edición IX la Cumbre de las Américas que se está realizando en Los Ángeles entre el 6 y el 10 de junio. El presidente Luis Lacalle Pou no pudo viajar a EE.UU. para participar del evento, como estaba previsto, porque el test de covid-19 que se realizó antes de partir dio positivo.
Biden estimó este jueves que hay unidad en la Cumbre de las Américas, después de que los representantes de Argentina y de Belice lo criticaran abiertamente por haber excluido a Nicaragua, Cuba y Venezuela.
"A pesar de algunos desacuerdos relacionados con la participación, en los asuntos sustanciales lo que escuché fue casi unidad y uniformidad", dijo Biden.
El presidente de Argentina, Alberto Fernández, encaró a Biden por excluir a Cuba, Venezuela y Nicaragua de la cumbre, y pidió reestructurar los organismos de integración regional. Como ya había adelantado antes de su viaje a EE.UU., Fernández habló en su calidad de líder de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), a la que pertenecen las naciones excluidas de la cita.
"El hecho de ser país anfitrión de la Cumbre no otorga la capacidad de imponer el derecho de admisión sobre los países miembros del continente", dijo durante la primera plenaria de gobernantes.
Estados Unidos consideró dejar fuera a los gobiernos de Venezuela, Cuba y Nicaragua, por considerar que "no respetan la democracia".
"El diálogo en la diversidad es el mejor instrumento para promover la democracia", dijo Fernández en su discurso.
El mandatario argentino reclamó por el "bloqueo" existente hace más de seis décadas contra Cuba, y consideró que una situación similar ocurre contra la Venezuela de Nicolás Maduro.
Fernández también pidió "reconstruir instituciones que fueron pensadas" para la integración, como la Organización de los Estados Americanos (OEA).
"La OEA, si quiere ser respetada y volver a ser la plataforma política regional para la cual fue creada, debe ser reestructurada, removiendo de inmediato a quienes la conducen", dijo, sumándose a las críticas contra el jefe de ese organismo, Luis Almagro, que también ha planteado México.
La novena Cumbre de las Américas se ve afectada por la ausencia de varios presidentes, incluido el mexicano Andrés Manuel López Obrador, como muestra de su descontento por las exclusiones.
AMLO envió a su canciller, Marcelo Ebrard, quien, a su llegada, calificó la exclusión de "error estratégico" y abogó por "refundar el orden interamericano".
"Es evidente que la OEA y su forma de actuar están agotados", dijo Ebrard el miércoles.
Messias
Biden dijo este jueves a su homólogo brasileño, Jair Messias
Bolsonaro, que el resto del mundo "debería poder ayudar" a Brasil a
"preservar todo lo que pueda" la Amazonía.
Biden se pronunció así al inicio de una reunión bilateral con Bolsonaro, la
primera entre ambos, en el marco de la IX Cumbre de las Américas.
El mandatario estadounidense reconoció sin embargo que Brasil ha hecho
"verdaderos sacrificios" a la hora de proteger el mayor bosque
tropical del planeta, en un contexto de críticas de la comunidad internacional
por los índices récord de deforestación en la Amazonía.
"Creo que el resto del mundo debería poder ayudarles a proteger todo lo
que puedan (la Amazonía)", indicó Biden.
Bolsonaro afirmó, por su parte, que Brasil "preserva muy bien su
territorio" y que "a veces" siente que la soberanía de Brasil
sobre su parte de la Amazonía se ve "amenazada", en alusión a las
críticas de otros países y organizaciones.
Desde que era candidato presidencial, Bolsonaro ha defendido la explotación de
los recursos naturales de la Amazonía, incluso en reservas indígenas, y desde
su llegada al poder en enero 2019 ha flexibilizado la fiscalización de
actividades que atacan al medioambiente, como la minería y el comercio de
madera, en su mayoría practicado de forma ilegal en esa región.
La relación entre Biden y Bolsonaro ha sido distante desde antes incluso de que
coincidieran en el poder, y la Casa Blanca adelantó antes del encuentro que el
mandatario estadounidense planeaba poner sobre la mesa el tema de la Amazonía y
la necesidad de que las elecciones brasileñas de octubre sean
"libres".
Durante la reunión, Biden trató no obstante de acercar posturas, describió a
Brasil como "un lugar maravilloso con gente maravillosa" y recordó
que ha visitado el país tres veces, incluido para un mundial de fútbol.
Añadió que parte de lo que hace a ese país maravilloso es su "vibrante e
inclusiva democracia y sus fuertes instituciones electorales", en un momento
de tensión por la postura de Bolsonaro ante las elecciones de octubre.
Las constantes referencias del presidente de Brasil al proceso electoral y al
"pueblo armado" han despertado temores en la oposición, y hasta en
algunas instituciones, de que en caso de una derrota en octubre el gobernante
anime a una reacción violenta a sus seguidores.
La base política de la ultraderecha, además, está integrada en buena parte por
militares y policías, todo lo cual ha llevado a muchos analistas a prever que
la campaña electoral de 2022 pueda ser salpicada por episodios de violencia.
En base a AFP y EFE