"Los resultados concuerdan con los obtenidos ya por laboratorios especiales en Alemania, Suecia y Francia. Esto confirma una vez más la evidencia inequívoca de que Alexéi Navalni fue víctima de un ataque con un agente químico nervioso del grupo Novichok", dijo en un comunicado el portavoz del Gobierno alemán, Steffen Seibert.
El Gobierno alemán, añadió Seibert, "está examinando el informe técnico detallado sobre análisis que la OPAQ le presentó ayer".
A mediados de septiembre, la OPAQ confirmó que había enviado a un equipo de expertos a Berlín a "recoger muestras biomédicas" de Navalni, y anunció estar "brindando asistencia técnica" en la investigación a Alemania, después de que expertos alemanes descubrieran que el agente Novichok fue la "fuente de la intoxicación" sufrida por Navalni.
Navalni se sintió mal a bordo de un avión que regresaba a Moscú desde Tomsk (Siberia) el pasado 22 de agosto, lo que obligó a realizar un aterrizaje de emergencia en Omsk, donde el opositor ruso fue ingresado en coma antes de ser trasladado a un hospital de Berlín, donde logró recuperarse en las últimas semanas.
En una entrevista con el semanario "Der Spiegel" el pasado jueves, Navalni, que abandonó ya el hospital alemán después de recibir tratamiento durante 32 días, acusó al presidente ruso, Vladímir Putin, de ser el responsable de su envenenamiento, una acusación considerada por el Kremlin como "insultante e inaceptable".
Hoy reiteró su acusación en una entrevista difundida por Youtube y de nuevo el Kremlin ha tachado esta afirmación de inadmisible.
Navalni recibió durante su tratamiento en el hospital berlinés de la Charité la visita de la canciller alemana, Angela Merkel, una iniciativa de la que en su momento el portavoz Seibert dijo que se trató de un "gesto inusual" y "estrictamente confidencial".
A principios de setiembre Merkel fue explícita al advertir a Moscú de que el envenenamiento de Navalni tendría una "reacción adecuada" por parte de la Unión Europea y de la OTAN.
Merkel se dirigió a Moscú en una breve declaración institucional el 2 de septiembre en cuanto trascendió que la Bundeswehr (ejército alemán) y el hospital de la Charité habían identificado, sin género de dudas, el tipo de veneno que se le suministró al líder opositor.
Con información de EFE