Entre los negocios que cayeron no bien se declaró la emergencia sanitaria por coronavirus el 13 de marzo están los pubs, bares, restaurantes y salones de eventos. Es decir, una amplia gama de negocios vinculados a la gastronomía y la nocturnidad.
Pero, como si fuera poco, tal vez sean los negocios que más demoren en reiniciarse. Es que una parte de ellos viven, en gran parte, del turismo, y a nadie escapa que el turismo será de las últimas actividades económicas en volver a la normalidad.
Por ello, una delegación del Centro de Almaceneros Minoristas, Baristas, Autoservicistas y Afines del Uruguay (Cambadu) se reunió este jueves con un representante del gobierno, el secretario de Presidencia, Álvaro Delgado, a quien le pidieron que se tomaran determinadas medidas para reducir los gastos fijos en estos meses de inactividad.
Según supo Montevideo Portal, los comercios piden que se reduzcan los costos de las tarifas públicas para ellos. También piden que se disminuyan los impuestos y que se amplíe el seguro de paro para los trabajadores.
En conversación con Montevideo Portal, el presidente de Cambadu, Antonio Ameijenda, dijo que en la reunión se plantearon "las inquietudes" que tienen los dueños de los locales gastronómicos.
Estas no solo se reducen a superar los problemas económicos de la crisis por la emergencia sanitaria, sino a su prolongación en el tiempo debido a la demora que tendrá el turismo en restablecerse.
"Tenemos tarifas comerciales y costos fijos que estando cerrados son muy altos", dijo Ameijenda, quien señaló que "si no hay consumo no podés pagar costos fijos".
En este sentido, lo que se pidió al gobierno es que "tuviera contemplación". Dentro de este mismo pedido está el de que los empleados puedan ampliar su seguro de paro o que, en caso de que no tengan derecho a él por no tener el tiempo mínimo de trabajo, puedan acceder igual.
Ameijenda señaló que este punto es crucial porque "si no los empleados van a buscar otros rumbos".
Por otro lado, los baristas también piden que las plataformas digitales de servicios de delivery cobren menores comisiones por cada traslado.
Las comisiones actuales pueden llegar hasta el 30 %, según la venta. En este sentido, los baristas quieren disminuir las comisiones, ya que vieron casi suprimidos los consumos en los locales y una de sus escasas formas de vender es a través de las plataformas.
Según Ameijenda, las ventas por aplicaciones de delivery no se incrementó tanto como se esperaba, y ese es otro motivo por los que piden que se reduzcan las comisiones que cobran las plataformas.
En la reunión también se conversó la posibilidad de que el uso obligatorio de tapabocas en supermercados se extienda a almacenes y otros comercios minoristas, lo que aún no fue anunciado oficialmente por el gobierno.