El Banco Central del Uruguay (BCU) incrementó la tasa de política monetaria (TPM) en 50 puntos básicos y la llevó hasta 10,25%.

“La decisión del Comité de Política Monetaria (COPOM) profundiza la fase contractiva de la política monetaria tras evaluar que persiste la rigidez de las expectativas de inflación de los agentes, y que la inflación, así como la subyacente, se mantienen fuera del rango meta. Para esta decisión se valoraron otros aspectos de la coyuntura internacional y local”, informó la institución reguladora en un comunicado.

En esta línea, se manifestó que en “el mundo se agudiza la preocupación por el menor crecimiento de la actividad económica, y la prolongación del conflicto en el Este europeo, entre otras tensiones geopolíticas, aunque se observan señales de desaceleración de la inflación mundial por la reducción de precios de los commodities, una menor tensión en la cadena de suministros, y temores asociados a una recesión global”. 


En esta línea, se destacó que en Uruguay la actividad económica “continuó con su recuperación en el segundo trimestre” y se mantiene en el tercero aunque “a un ritmo más moderado”.

“En ese contexto, el COPOM mantiene la preocupación por la rigidez de las expectativas de inflación de los agentes, valora positivamente los canales de transmisión de la política monetaria que funcionan en el sentido esperado, y entiende necesaria y oportuna la suba referida en la tasa de política monetaria”, señala la misiva.

El BCU anticipó que se va a continuar con aumentos similares en las próximas reuniones y reafirmó el “compromiso de profundizar el talante contractivo de la política en caso de mantenerse rígidas a la baja dichas expectativas”.

El dato de inflación de julio fue de 9,56% y en la última encuesta de expectativas los agentes económicos respondieron que se espera el año cierre en 8,60%.