El 3 de julio de 2022, dos meses después que se conociera la noticia de la separación del presidente Luis Lacalle Pou y su esposa, Lorena Ponce de León, el entonces jefe de la seguridad del mandatario y su familia, Alejandro Astesiano, pidió al subdirector ejecutivo de la Policía Nacional, Jorge Berriel, que le averiguara en “modo reservado” sobre un viaje personal de quien aún se presenta como primera dama.

“Perdón la hora, estamos en Colombia”, le escribió Astesiano a Berriel a la hora 23:44 del 3 de julio. “Tenemos modo reservado averiguar Lorena Ponce de León. Viaja mañana las 6 de la mañana. Donde va. Reservado total”, agregó el custodio del presidente. Lacalle estaba a esa hora en Colombia, adonde había viajado en visita oficial para mantener un encuentro con el mandatario de ese país, Iván Duque.

“Complicado pero veremos”, respondió Berriel, como revelan chats difundidos por MVD Noticias, a los que también accedió Montevideo Portal, y que forman parte de la investigación sobre Astesiano, imputado y en prisión preventiva por la comisión de tres delitos.

Entonces, Astesiano le contestó: “Solo sabemos que a las 5 tiene que estar en el aeropuerto. Gracias”.

Además, le explicó que estaban en el “avio”, en referencia al avión en el que viajó junto a Lacalle a Uruguay. “Vamos a ver el mensaje cuando aterricemos en Montevideo”, agregó.

“Igual cuando haga la migración”, escribió por WhatsApp el entonces custodio del presidente. El subdirector ejecutivo de la Policía Nacional le respondió: “Ok algo te averiguo”.

Astesiano aclaró: “Solo a vos”, en referencia a la reserva de la información y al pedido.

A la hora 0:33 del 4 de julio, Berriel envió un mensaje con información precisa: “Está en el vuelo de LATAM LA2421 de la hora 06:52 con destino a Lima”.

Nueve horas después, agregó: “Viaja con un pasaporte Americano”.

“Sale ahora en el vuelo de LATAM LA2421 de la hora 06:52 con destino a Lima y ahí conecta con LA 2464 con destino final Miami. Ya hizo Migraciones y está en el vuelo, y regresaría el día 09.07 desde San Pablo en el vuelo LA8118 a la hora 09.55”, informó Berriel.

“Viajó en un vuelo de Latam, en el aeropuerto no tienen aún el destino, ahora me lo van a averiguar, pero están tratando de hacerlo sin pedir por ella para no llamar la atención”, aseguró el jerarca policial, y aclaró: “Por las dudas, acaba de despegar el avión, se fue 5 minutos antes de lo previsto”.

Motivos de seguridad

En el entorno de Lacalle hay mucha molestia con la difusión de estas conversaciones porque entienden que atañen a la vida familiar del presidente. Consideran que se “cruzó un límite”.

Las fuentes explicaron a Montevideo Portal que la averiguación de Astesiano tiene fundamento en la seguridad del presidente y su familia. Por más que Ponce de León ya no fuera pareja de Lacalle, siguen casados y es la madre de sus hijos, por lo que aún cuenta con custodia. “No es opcional”, insistieron.

A su vez, expresaron que la forma en que se accedió a los datos del viaje de Ponce de León se enmarca en un momento privado de la expareja. Según pudo saber Montevideo Portal, debido a cierta tensión luego de la separación, ella había dejado de informar sus movimientos a los custodios. Eso se refleja en algunas conversaciones entre los miembros del equipo de seguridad.

El 4 de julio, el mismo día que se comunicó con Berriel, Astesiano también intercambió mensajes con quien custodiaba específicamente a Ponce de León. Alejandro —cuyo apellido no figura en los chats— le envió un audio al exjefe de la custodia presidencial, que unos minutos después le respondió: “Vos conmigo nunca hablaste”. Su interlocutor agregó que ella no quería “decir a dónde va”. “Pero ta… yo no te voy a ocultar cosas”, escribió.

“¿Dónde irá?, ¿alguna pista?”, le preguntó Astesiano, y el otro custodio respondió con un audio (no disponible) para después enviar: “Capaz que Brasil otra vez, pero te juro que ni idea”.

“Dale, Ale. Bien”, respondió Astesiano, a lo que el encargado de seguridad de la expareja de Lacalle envió: “A la orden y leal siempre”.

Astesiano respondió que lo sabía y añadió: “Estoy hablando con el presidente. Estamos en avión ya”.

“Bueno, buen regreso. Si me corre mala suerte. Yo soy leal a vos y obvio que al presidente”, volvió a expresar Alejandro.

Unas horas más tarde envió otro mensaje: “Están aeropuerto, al parecer por los vuelos se va a Perú [...] llega el sábado 07:15”.

Astesiano, que por ese entonces ya había hablado con Berriel, respondió: “Sí, tengo todo ya. Está en vuelo Latam LA2421 de la hora 06:52 con destino a Lima”.

“Gracias, Ale”, respondió quien custodiaba los movimientos de Ponce de León. “Se que vos conseguis todo. A la orden”, dijo según consta en los chats a los que accedió Montevideo Portal. 

El intercambio de mensajes continuó por ese día, mayoritariamente a través de audios. En determinado momento, Alejandro le dijo a Astesiano: “Si me corre Loli, me voy de secretario tuyo jaja”. Astesiano respondió: “Sí, tranqui”.

Reacciones de la oposición

El contenido de los chats fue interpretado por algunos representantes de la oposición como un acto de “espionaje” de parte del presidente a su expareja.

A su vez, varios frenteamplistas salieron en redes a respaldar a los periodistas de El Observador, que difundieron la información en sus cuentas personales de Twitter pese a que el medio no la publicó.

Para el senador Alejandro Sánchez, el presidente “usó al Estado para espiar” a Ponce de León. También opinó que los periodistas de El Observador “rompieron la censura”.

Otro que se expresó al respecto fue el intendente de Canelones, Yamandú Orsi, que hizo consideraciones acerca de la libertad de expresión.

También escribió en Twitter el senador Charles Carrera: “Hoy se vulneran derechos, espían opositores, exesposas, y presionan medios para no publicar información de interés público”.