Desde Argentina
El sonido de bombos, platillos y trompetas, los ruidos de fuegos artificiales y el olor a choripán signaron las primeras horas de la tarde de este domingo 19 de noviembre en las inmediaciones del Complejo C (en el barrio porteño de Villa Crespo), búnker elegido por el candidato Sergio Massa para recibir los resultados del balotaje presidencial en Argentina.
Foto: Daniela Flores.
Maxi (48), militante peronista “de toda la vida”, estaba con sus compañeros del Sindicato de Obreros Marítimos Unidos, cuando expresó que este domingo se jugaba ”un montón” y agregó: “Dios quiera y la Virgen que nos acompañe y gane Massa”.
Foto: Daniela Flores.
Pero a medida que pasaban las horas, la esperanza decaía. Sobre las 19:40 horas, el ruido empezó a mermar y las sonrisas cada vez eran menos visibles.
El cambio anímico era reflejo de lo inminente: el discurso del actual ministro de Economía se iba a adelantar de las 21 horas a las 20 horas porque los resultados primarios lo daban como perdedor por una diferencia de más de cinco puntos. Las cifras que aparecían en las placas de los principales canales de noticias marcaban 53% para el candidato libertario Javier Milei y 47% para Massa.
Las miles de personas que bailaban, cantaban y tocaban instrumentos esperanzadas hacía una hora, a las 20 horas redujeron su candidato oficialista salga al escenario montado sobre la calle.
Foto: Daniela Flores.
El ministro de Economía empezó agradeciendo a funcionarios de las elecciones y dijo que “fue una campaña muy larga y difícil”. También agradeció a la militancia y destacó el sistema “sólido y transparente” de Argentina, “que respeta siempre los resultados”.
Bajo el escenario algunas personas ya empezaban a llorar. Otros se abrazaban, había grupos de personas abrazadas en ronda y un sentir de tristeza general.
“Obviamente los resultados no son los que esperábamos”, sostuvo, y comentó que llamó a Milei para felicitarlo.
“Seguramente la vida me depare otras tarea y responsabilidades, pero siempre van a contar conmigo”, afirmó.