Días atrás, el comisionado parlamentario para las cárceles, Juan Manuel Petit, informó sobre casos de desnutrición de presos en el Compen (ex Comcar). Luego el Ministerio del Interior también se refirió a la situación de los presidiarios, que fueron trasladados a distintos centros asistenciales por su preocupante estado de salud.
Según el MI, la situación de los internos fue advertida por los funcionarios del Instituto de Rehabilitación, que le brindaron al comisionado parlamentario los elementos "con los que elaboró su informe".
Además, la cartera asegura que los hombres estaban en tres celdas diferentes y se niegan a revelar la "verdadera" razón de sus estados, "ya que los alimentos llegan al sector y son distribuidos por privados de libertad, que son encargados de su reparto".
Trabajadores del Compen, sin embargo, dijeron a Montevideo Portal que hay grandes diferencias en la clase de comida que reciben los distintos presos. Como ejemplo, revelaron fotos y videos del alimento que llega para los reclusos del módulo 8, donde se produjeron los casos difundidos.
En las imágenes se pueden observar varias ollas colocadas en el suelo con una suerte de caldo dentro. Algunas de las ollas tienen muy poco alimento.
Las fuentes aseguran que, en contraste con esta situación, la comida que reciben los presos del polo industrial del Compen es muy distinta, porque son presidiarios de confianza. "De los que se preocupan de alimentar bien son esos", explicaron las fuentes, que como prueba agregaron una foto de algunos de ellos comiendo un asado. La imagen fue subida por uno de los reclusos a su perfil de Whatsapp (ya que los presidiarios que trabajan en ese sector tienen teléfonos).
Fuentes del sistema carcelario confirmaron esta información a Montevideo Portal y agregaron que están al tanto de la situación y que las irregularidades en la alimentación deben investigarse y corregirse.
Desde el Ministerio del Interior explicaron a Montevideo Portal que se trata de una "situación aislada" que afecta a un porcentaje muy reducido del centro carcelario.
Además, agregaron que la comida llega para todos los módulos (incluyendo la carne) y que son los presos los que trabajan en la cocina preparando la comida para los demás reclusos. Si bien aclararon que controlar eso también es responsabilidad de la cartera, las fuentes explicaron que se está en proceso de aislar a los elementos que hacen que la comida no llegue bien a algunos reclusos.
"Estamos en pleno proceso de corregir estas cosas. No olvidemos que cuando asumimos había un problema de hacinamiento brutal, de falta de personal, de un sistema colapsado. Vaya si hubo avance en siete años", dijeron.
Actualmente, el Instituto de Rehabilitación realiza una auditoría interna para establecer cuánta comida llega a cada módulo y cómo se reparte.