Jorge Gómez, un comisario retirado que asesora a Cabildo Abierto en temas de seguridad y que trabajó en las 12 medidas propuestas por Guido Manini Ríos el pasado lunes, afirmó que está en contra de la iniciativa presentada por los partidos de la coalición de gobierno para modificar la Constitución con el objetivo de habilitar los allanamientos nocturnos.
Además, el exfuncionario policial cuestionó algunas de las políticas de seguridad llevadas adelante por el actual Ministerio del Interior.
“Es un poco atrevido, pícaro, [Diego] Sanjurjo al manifestar que las propuestas de Cabildo Abierto venden humo. En realidad, no es nuevo, porque su teoría en cuanto a la prevención social, no a la preventiva, es una de las políticas que impulsa a raíz de la financiación del BID [Banco Interamericano de Desarrollo]. Por ejemplo, impulsar los interruptores de violencia que desde hace un año se están aplicando y todavía no tenemos información si dieron resultado. Voy a tratar de ser sutil, aunque no es mi característica. Me parece que a Sanjurjo le falta pisar un poco el barro”, afirmó Gómez.
En esta línea, argumentó que la “realidad no se percibe en toda su potencia desde la cúspide del mando”.
“Hay que pasar a vivirla, también nutrirse de los aspectos académicos. Hay círculos que confluyen en ámbito común para la toma de decisiones: el mando político, el policial y el académico de asesoría y estadísticas. El mando político tiene que tomar las decisiones en base a lo que le dice el policial y los asesores, pero no puede haber preponderancia de uno sobre el otro”, cuestionó Gómez.
En tanto, Sanjurjo había señalado en radio Sarandí que las 12 propuestas hechas por Cabildo Abierto sobre seguridad no tenían mayor novedad y son “humo”.
En contra
Consultado sobre su postura con relación al plebiscito para habilitar los allanamientos nocturnos, el comisario retirado dijo que, aunque la fuerza política que asesora acompaña la propuesta, él está en contra por las condicionantes que implica para la Policía.
“Se condicionó el apoyo a determinado tipo de cosas. Por ejemplo, la concurrencia preceptiva de un fiscal y de un juez a esos allanamientos nocturnos. Además, hay que dotar a la Policía de los mecanismos técnicos, como visores nocturnos, para darle garantías a los policías. A su vez, hay que realizar un entrenamiento especifico para que el policía pueda actuar en un marco de seguridad. De todas formas, nosotros sugerimos no acompañar, porque estas condicionantes eventualmente no sabemos si se van a cumplir”, añadió.
Gómez apuntó que en la papeleta solo se propone la modificación del artículo 11 de la Constitución, que establece: “El hogar es un sagrado inviolable. De noche nadie podrá entrar en él sin consentimiento de su jefe, y de día, solo de orden expresa de juez competente, por escrito y en los casos determinados por la ley”.
Sin embargo, consideró, al plantear que en la modificación no se “especifican todas las eventualidades que tienen que dar garantías”.
“Garantías a los policías, a la Justicia, a la Fiscalía, a las personas sobre las que vas a intervenir y al entorno. Hay entre cinco o seis artículos en la Ley de Procedimiento Policial que condicionan toda la responsabilidad sobre las operaciones sobre quien dirige o dispone las actuaciones. Esta [propuesta] es una picadora de carne de policías, como dice vulgarmente un compañero. Como herramienta, eventualmente, puede servir, pero los riesgos inherentes a operar en esa materia tienen que justificar el beneficio”, valoró Gómez en entrevista con Se arregla el mundo, de FM HIT.