En la noche del lunes, un numeroso grupo de alumnos del colegio Sagrado Corazón, de la ciudad argentina de Rosario, se aprestaban a salir de excursión rumbo a Córdoba.
Sin embargo, la excursión debió aplazarse debido a un contratiempo inesperado: los cuatro choferes que debían conducir los autobuses dieron resultado positivo en una prueba de control de consumo de cocaína.
Según informara el medio local Rosario 3, los cuatro trabajadores declararon que no habían consumido dicha droga, pero admitieron haber masticado hojas de coca.
Carolina Labayru, secretaria de Control y Convivencia de la provincia de Santa Fe, explicó que en el caso se aplicó el protocolo previsto: retiro de licencia de conducir a los cuatro trabajadores, registro de acta y solicitud de nuevos choferes a la empresa.
“El descargo que hacen es que estaban consumiendo hojas de coca. Pero no podemos determinar si consumieron cocaína o si mascaron coca; por eso, consideramos que pueden llegar a ser un riesgo para la seguridad vial y lo que se hace es no permitir que realicen la conducción”, explicó la funcionaria.
De acuerdo con el citado medio, el viaje se concretó al día siguiente, con choferes “en condiciones”.