El veto del presidente de Argentina, Javier Milei, a la ley de financiación de la educación universitaria quedó firme, luego de que este miércoles no se reunieran los votos necesarios en la Cámara de Diputados para rechazar la decisión del jefe de Estado.

Un total de 160 diputados votaron en contra del veto, 84 lo hicieron a favor y cinco parlamentarios se abstuvieron. De esta forma, la cámara no alcanzó los dos tercios necesarios para aprobar el proyecto más allá del veto del mandatario.

El oficialismo, minoritario en el Parlamento argentino, consiguió sostener el veto presidencial gracias al apoyo de legisladores del partido Propuesta Republicana (Pro), que lidera el expresidente Mauricio Macri (2015-2019), aliado de Javier Milei.

En paralelo con la votación, cientos de manifestantes se concentraron en los alrededores del Congreso para expresar su rechazo a la decisión del presidente.

La ley de financiación universitaria, aprobada por el Congreso el pasado 13 de setiembre, establecía actualizar los fondos para gastos de funcionamiento de las universidades por la variación del índice de inflación, que en agosto se ubicó en el 236,7% interanual.

Asimismo, ordenaba una recomposición de los salarios universitarios, también teniendo en cuenta la inflación.

El pasado 3 de octubre, Milei vetó la norma con el argumento de que su aplicación comprometería el objetivo del equilibrio fiscal buscado por el Gobierno.

La Constitución argentina habilita al presidente a vetar total o parcialmente una ley, veto que el Parlamento puede superar volviendo a someter a votación el proyecto y obteniendo el voto afirmativo de al menos dos tercios de ambas cámaras legislativas.

Ésta es la segunda vez que Milei logra mantener un veto a una ley: en septiembre pasado la Cámara de Diputados convalidó un veto del presidente a una norma que establecía una nueva fórmula para actualizar las jubilaciones.

EFE