"Hasta el 17 de julio eso funcionará así en toda el área metropolitana de Buenos Aires", señaló el mandatario a través de la emisión de un mensaje grabado desde la residencia presidencial de Olivos, en la provincia de Buenos Aires (este).
"Hay que aislar el área metropolitana de Buenos Aires del resto del país", enfatizó el presidente.
A partir del lunes, el servicio público sólo será utilizado por trabajadores de 24 actividades esenciales ya definidas por el Ejecutivo.
A partir del miércoles 1 de julio, y hasta el 17 de julio, la ciudadanía de Buenos Aires sólo podrá salir para hacer compras esenciales.
En los últimos 20 días los casos aumentaron 147 por ciento en esta región, y los fallecidos, 95 por ciento, dentro de un país que supera los 52.000 casos y los 1.160 muertos desde el inicio de la pandemia.
"Necesitamos ganar tiempo para garantizar que el sistema de salud pueda atender a todos los argentinos, y lo que estamos notando es que con esta aceleración tenemos que hacer algo para frenar el ritmo de contagios", explicó Fernández.
Argentina tiene una tasa de contagios de 115,6 casos cada 100.000 habitantes, y una tasa de fallecidos de 25,3 por cada millón de habitantes.
Estos es uno de los mejores indicadores que se registran en la región, sólo por detrás de Paraguay y Uruguay.
Por eso "la cuarentena es el único remedio que conocemos contra la pandemia", indicó Fernández.
El Gobierno aprovechará este tiempo para intensificar el programa Detectar, que busca de manera activa casos sospechosos y los vínculos de proximidad de los pacientes con el virus SARS-CoV-2.
Además "vamos a mejorar nuestra capacidad de diagnóstico médico porque vamos a utilizar pronto los test rápidos, y tendremos un mejor aprovechamiento de los centros de aislamiento", añadió el mandatario.
(Sputnik)