La Intendencia de Montevideo (IM) decidió implementar en la rambla un espacio recreativo "sin motores", para cambiar algunas dinámicas de los espacios públicos durante la pandemia del nuevo coronavirus.
La iniciativa comenzará a funcionar a partir de este domingo y seguirá durante los siguientes, aunque se irá evaluando con el correr de las semanas.
La IM argumentó que "desde el 13 de abril, tras el retorno de la actividad en el sector de la construcción, se empezó a observar un aumento de la movilidad, tanto en volumen de tránsito como en la utilización del transporte y ocupación de los espacios públicos".
"Teniendo en cuenta esto, así como la 'nueva normalidad' en la cual se han retomado múltiples actividades con las medidas sanitarias recomendadas (uso de tapabocas y distanciamiento social), la Intendencia evaluó la posibilidad de aplicar nuevas medidas en materia de recreación y esparcimiento", dice la comuna en su página web.
Fue por esto que se resolvió "instrumentar un nuevo espacio recreativo 'sin motores' en la rambla de Montevideo, en la senda sur (hacia el Este), en el tramo desde Ciudadela a Luis Alberto de Herrera".
La IM afirma que la medida implica que por la zona solo podrán circular peatones, patinadores y ciclistas, pero no vehículos particulares motorizados (monopatines y segway).
La medida se aplicará todos los domingos entre las 10 y las 18 horas. La comuna explicó que se resolvió luego de "un trabajo conjunto entre el Departamento de Movilidad, la Secretaría de Deportes y Recreación y el Servicio de Convivencia Departamental de la Intendencia, que colocarán señalización mediante balizas y vallas, e instrumentarán controles con inspectores a pie para que se cumpla con las reglas de funcionamiento del nuevo espacio".
"Estas reglas de funcionamiento consisten en que se mantenga el distanciamiento físico adecuado entre las personas, vital para evitar contagios o la propagación del Covid-19 y se respeten los límites físicos del espacio".
En este sentido, la IM señaló que la distancia recomendada por los expertos es de dos a cuatro metros entre peatones, 10 metros entre quienes corren y 20 metros entre quienes se desplazan en bicicleta.
La IM explicó que esta experiencia se evaluará para ver si continuará todos los domingos como está planificado y si se extenderá a otros espacios públicos, como en las zonas de Prado, parque Rodó y parque Rivera.
A su vez, no se descarta "aplicar una medida similar en la avenida 18 de Julio, en conjunto con Grupo Centro, cerrando la calle los sábados en la tarde".
Según la comuna, con esta última iniciativa "se habilitaría un espacio recreativo sin motores con los comercios abiertos hasta las 17 o 18 horas, funcionando como un espacio de compras a cielo abierto, que permitiría a su vez revitalizar el centro de la ciudad".