La defensa de Nicolás Rocca —conductor de la camioneta Volkswagen Nivus— y la defensa de Josefina Ferrero —conductora del auto Ford KA—, ambos protagonistas del accidente que se dio en ruta 104 en el balneario Manantiales luego de una fiesta, estaban esperando la pericia oficial de la Policía Nacional para determinar cuál de los dos automóviles se había cruzado de carril.
Según determinó el análisis del Laboratorio de Accidentología Vial y Laboral de la Dirección Nacional de Policía Científica, que está bajo la órbita del Ministerio del Interior, el vehículo que cambió su trayectoria e ingresó al carril contrario fue el de Nicolás Rocca.
El documento del que informó primariamente el diario La Nación y al que accedió Montevideo Portal indica que, analizada la información aportada, se observa que la vía de tránsito es de asfalto, está en buenas condiciones de circulación y presenta una pendiente y curva.
“Se observa sobre la calzada y banquina para los vehículos que circulan al Sur (y orientado al Noroeste) al auto [Ford], mientras que la camioneta [Volkswagen] se encontraba parcialmente sobre la senda y banquina para los vehículos que circulan al Sur (orientada al Noroeste)”, señala el informe.
El documento indica que el accidente fue 24,5 metros hacia el sur de donde fue observado el auto Ford. La Nivus, en tanto, se ubicaba sobre la senda de circulación norte aunque viajaba hacia el sur, según destaca el texto.
“En la zona se aprecian marcas de arrastres de elementos rígidos sobre el pavimento lo que evidencia la zona de colisión, y movimientos vehiculares post-colisión, siendo la mencionada zona corregida por este laboratorio, ubicándose con exactitud dicha zona de colisión en el extremo Norte de la disposición de los mismos (arañazos o marcas de elementos rígidos sobre el pavimento), y sobre el centro de la senda Este, por donde circulaba el auto marca Ford modelo KA”, agrega.
En cuanto a la inspección de los daños, los de la camioneta se ubican en el frontal y además presentó hundimiento en la zona del capó y el motor, “con acentuación en sector medio izquierdo”. Los daños del auto se observan también en su “frontal lateral derecho”, con un colapso del habitáculo, “siendo coincidente con la mecánica del hecho”.
Asimismo, el informe aclara que no se observaron indicios de la participación de otro vehículo en el suceso.
“En cuanto a la velocidad a la que circulaban los vehículos, de la pericia mecánica surge que el auto marca Ford modelo Ka circulaba al momento del hecho a una velocidad aproximada de 63 km/h ya que producto de los daños en su frontal, se perdió el flujo eléctrico hacia el tablero por los daños, quedando el cuentakilómetros en la ubicación de velocidad que marcaba al momento del daño”, indica el texto.
“A su vez, a posterior de la colisión y luego de llegar a velocidad cero, el mismo es proyectado en sentido contrario al que venía circulando (producto de la colisión) hacia el Sur, con una velocidad inicial de 40km/h, hasta posarse en su posición final. Esta velocidad es impresa por parte del otro vehículo (camioneta VW Nivus) hacia este (auto Ford Ka)”, agrega.
En cuanto a la velocidad de la camioneta, el informe presenta que, empleado el método energético de cálculo de velocidad por deformación —teniendo en cuenta las medidas de deformación en su sector frontal y sus medidas originales—, se obtiene que circulaba entre los 45 y los 85 km/h; sin embargo, según la proyección anteriormente mencionada y la velocidad inicial de proyección del Ford, el análisis destaca que la velocidad de la Nivus “se acerca al margen superior del rango calculado”.
Conclusiones
La conclusión del informe, teniendo en cuenta el desarrollo de las causas y analizado todos los factores, es que el hecho deriva del denominado “factor humano”, es decir, aquel que deriva de las acciones de las personas involucradas.
Luego, especifican las responsabilidades para este caso. La causa “resulta específicamente por el accionar del conductor de la camioneta Nivus”, dice el documento, y agrega que la camioneta circulaba “a una velocidad inadecuada y excesiva, invadiendo la senda contraria de circulación (por el subviraje) interponiéndose en la trayectoria del Ford”.
Cabe destacar que la defensa de Nicolás Rocca, los abogados Ignacio Durán y Pablo Donnangelo, presentaron un informe de un perito privado que dictaminó lo contrario a Policía Científica. Hasta el momento, Montevideo Portal no pudo acceder a él.