Nicolás Rocca, protagonista del accidente ocurrido en Manantiales, fue imputado por homicidio culposo por la muerte de las dos jóvenes argentinas que conducían el Ford Ka y la lesión de las otras dos ocupantes, según informaron a Montevideo Portal fuentes del caso.

Rocca iba al mando de la Volkswagen Nivus y el examen toxicológico arrojó que había consumido metanfetaminas, éxtasis, alcohol y morfina. Esta última, aclara el documento, fue a “concentración terapéutica”.

Al momento del accidente, el ahora imputado aseguró que venía de una fiesta privada.

En tanto, la conductora del Ford —quien resultó muerta producto del impacto— también había consumido drogas. Según el examen, tomó cocaína, metanfetamina, ketamina, éxtasis y cannabis.

El vehículo que se cambió de carril y provocó el accidente fue el de Rocca, de acuerdo al análisis del Laboratorio de Accidentología Vial y Laboral de la Dirección Nacional de Policía Científica.