El presidente palestino, Mahmud Abás, calificó este sábado el veto de Estados Unidos en el Consejo de Seguridad de la ONU para evitar la entrada de Palestina en Naciones Unidas como miembro de pleno derecho de “flagrante agresión” contra los derechos del pueblo palestino y de “desafío a la voluntad de la comunidad internacional”.
Abás también subrayó que tras este bloqueo reconsiderará las relaciones bilaterales con Estados Unidos, para asegurar la protección de los intereses de los palestinos, sus derechos y su causa.
“Reconsideraremos las relaciones bilaterales con Estados Unidos para asegurar la protección de los intereses de nuestro pueblo, nuestra causa y nuestros derechos”, dijo el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), en una entrevista con la agencia de noticias palestina WAFA.
El jueves, EE.UU. vetó la resolución, que recibió el apoyo de 12 miembros, la abstención de dos (Reino Unido y Suiza) y solo el voto contrario de Washington.
“Estados Unidos ha violado todas las leyes internacionales y ha roto todas las promesas de las que habla con respecto a la solución de dos Estados y el logro de la paz en la región”, dijo Abás, que pidió a la Administración del presidente Joe Biden que revise sus “políticas equivocadas”.
Asimismo, advirtió que “las posiciones hostiles” de EE.UU. “han creado una ira sin precedentes entre el pueblo palestino y los pueblos de la región, lo que podría empujar a la región hacia una mayor inestabilidad y a aumentar el caos y el terrorismo.”
En este sentido, volvió a denunciar la “guerra de aniquilación en curso” contra Gaza lanzada por Israel y lo que describió como una “campaña frenética” contra la Agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA) “destinada a matar de hambre al pueblo palestino” antes de avisar que estas políticas “llevarán a la región al borde del abismo”.
Desde que comenzó la guerra entre Israel y Hamás, el pasado 7 de octubre, 34.049 personas han muerto en la Franja y 76.901 han resultado heridas en la ofensiva israelí.
Ahora, el tema pasa a la Asamblea General
El veto que Estados Unidos ha interpuesto a la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU para reconocer a Palestina como estado de pleno derecho de la ONU (y no mero observador) pasará ahora a la Asamblea General.
Desde abril de 2022, y tras una reforma en el reglamento de la ONU, los casos en los que un Estado miembro permanente usa su derecho de veto tienen que ir forzosamente a debate a la Asamblea General, donde las resoluciones no son vinculantes pero tienen alto valor simbólico.
El reglamento dice que cada resolución vetada debe luego aterrizar en la Asamblea “dentro los diez días laborables siguientes”, es decir, en este caso, hacia el 7 de mayo.
Con esta reforma se pretende limitar el uso del veto, porque así se obliga a uno de los cinco miembros permanentes que así lo utilice (EE.UU., Rusia, China, Francia y Reino Unido) a ofrecer explicaciones en la Asamblea, donde se sientan todos los países, grandes o pequeños, en pie de igualdad.
En 2012, cuando la entrada de Palestina como 'estado observador' en la ONU (una condición que solo tenía el Vaticano) llegó a la Asamblea General, 138 países votaron a favor, 41 se abstuvieron y solo nueve votaron en contra, entre ellos EE.UU., Canadá, Israel, Panamá y la República Checa. Los otros cuatro fueron microestados del Pacífico.
Palestina había pedido un año antes, en 2011, su admisión como estado de pleno derecho, pero entonces la cuestión quedó “aparcada” en el Comité de Admisiones y no llegó a votarse en el Consejo, llegándose más tarde a esa solución de compromiso.
Se ha rumoreado en los pasados días que Palestina podría buscar ahora elevar su rango como Estado, aunque eso suponga crear una nueva figura que le permita superar su estatus de “observador”, todo ello antes de que la cuestión llegue en dos semanas a la Asamblea.
Repercusiones
Jordania y Egipto, firmantes de la paz con Israel y este último clave mediador entre los palestinos en Gaza e Israel, expresaron su “profundo pesar” por la “incapacidad” del Consejo de Seguridad de la ONU de aprobar la entrada de Palestina como miembro de pleno derecho en las Naciones Unidas, de la que ahora es solo estado observador.
En la primera reacción árabe, el Ministerio de Exteriores egipcio criticó este jueves implícitamente el veto de Estados Unidos a una resolución del consejo que abría la puerta a la entrada de Palestina en la ONU, ya que se produce “en un momento crítico”, e instó a los “países que buscan la paz” a “actuar con responsabilidad para reavivar el proceso de paz” en Oriente Medio. “Egipto expresa su profundo pesar por la incapacidad del Consejo de Seguridad, en el contexto del uso del veto de EE.UU., de adoptar una resolución que permitiera que el Estado de Palestina obtenga membresía de pleno derecho en las Naciones Unidas”, dijo un comunicado del citado departamento.
Por su parte, Jordania, país que en 1994 se convirtió en el segundo país árabe en firmar la paz con Israel, después de Egipto (1979), consideró que aceptar a Palestina como miembro de la ONU de pleno derecho “es un derecho inalienable del pueblo palestino y una responsabilidad legal y moral para el Consejo de Seguridad”.
“La encarnación de un Estado palestino independiente con soberanía sobre el territorio nacional palestino es inevitable, y obstruir (este paso) sólo contribuirá a prolongar el conflicto y aumentar la tensión”, dijo un comunicado del Exteriores jordano.
El Gobierno de México, a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE, Cancillería) lamentó que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas no haya aprobado la admisión de Palestina como miembro de pleno derecho del organismo, esto tras el veto.
“Apoyamos la aspiración de Palestina, a la luz del prolongado estancamiento en el proceso de paz”, apuntó la Cancillería mexicana en un comunicado. Asimismo, México expresó que “apoya la premisa de dos Estados, en apego a las resoluciones de la ONU, como la base para alcanzar una paz duradera”.
El Gobierno de Japón lamentó el veto, al considerar que Ramala cumple los requisitos exigidos para entrar en la ONU. “Japón considera que la votación en el Consejo de Seguridad sobre la entrada de Palestina en la ONU debería haber permitido la participación de todos los países implicados. Es lamentable que no haya sido así”, dijo el portavoz gubernamental japonés, Yoshimasa Hayashi, a raíz del resultado.
“Japón considera que Palestina cumple las condiciones para la entrada en la ONU y por ello ha votado a favor, considerando que ello podría haber promocionado el establecimiento de una nación a través de negociaciones de paz en Oriente Medio”, añadió el nipón.
El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, aseguró este viernes que la “hipocresía y el cinismo” de EE.UU. “quedaron expuestas” tras el veto que interpuso. En un mensaje difundido en X, el mandatario cargó contra la decisión estadounidense y señaló que “una vez más”, el Consejo de Seguridad quedó “incapacitado por el veto del imperio, para enfrentar y resolver los más graves conflictos internacionales”.
El Gobierno de Chile lamentó este el veto a la admisión de Palestina como miembro pleno de Naciones Unidas y dijo que el reconocimiento del Estado palestino “es condición fundamental para alcanzar la paz”.
“El Gobierno de Chile se suma a lo señalado por gran parte de la comunidad internacional, en el sentido que el reconocimiento de un Estado Palestino es condición fundamental para alcanzar la paz, además de contribuir a estabilizar la delicada situación que atraviesa Medio Oriente”, indicó la Cancillería chilena en un comunicado.
“El pueblo palestino tiene derecho a la autodeterminación y al ejercicio de su soberanía. El reconocimiento de Palestina como miembro pleno de la ONU es un paso crucial hacia la paz y la estabilidad en Oriente Medio”, señaló por su parte la Cancillería de Bolivia en un comunicado de prensa.
En base a información de EFE