La primera escena de la película argentina Relatos salvajes (2014) se convirtió ya en clásica y circula en redes sociales en versiones adaptadas.

En dicho pasaje, los pasajeros de un avión conversan y descubren que todos tienen un conocido en común: el piloto del avión. También caen en la cuenta de que todos llegaron al vuelo con pasajes de cortesía o con beneficios, inducidos por el tripulante.

Finalmente, se revela que todo es una suerte de venganza suicida del aviador, quien estrella el aparato sobre la casa de sus propios padres.

La influencia de esta escena de ficción parece apreciarse en un hecho real ocurrido esta tarde en la ciudad argentina de Rosario.

Allí, según informara el medio local Aire de Santa Fe, una avioneta se estrelló contra una empresa distribuidora de tanques de oxígeno. A raíz de la colisión, el piloto falleció.

En el lugar se constataron daños materiales, pero por fortuna no hubo que lamentar más fallecidos ni lesionados.

De acuerdo con el citado medio, el siniestrado aviador había trabajado hasta hace dos meses en ese lugar.

“Estaba sentado en el patio en la hora de descanso y pasó un avión volando bien bajo. Y después se escuchó un ruido muy fuerte. Y en seguida se escuchó una sirena por cuestiones de seguridad. Habrá sido a las 12. Los bomberos vinieron rápido”, contó un trabajador de la firma en declaraciones a El Tres TV.

De acuerdo con el periódico La Nación, en la causa intervendrá la Unidad de Homicidios Culposos.