La Justicia de Artigas mandó a la cárcel a un hombre que abusó sexualmente de su hija, una niña de 11 años a la que amenazaba con matar a su hermano si lo denunciaba.
La Fiscalía Departamental de Artigas a cargo del fiscal Hermes Antúnez y representada por la fiscal adscripta Fiorella Marzano logró la condena mediante un juicio abreviado.
El hombre fue hallado autor penalmente responsable de un delito de abuso sexual especialmente agravado. La pena será de cinco años y ocho meses de penitenciaría en cumplimiento efectivo.
En junio, la madre de la víctima denunció que su hija de 11 años había sido abusada sexualmente por parte de su padre. Expresó que la niña quedó por unos días bajo el cuidado de su padre y de su tía y luego de ese tiempo observó cambios notorios y radicales en su conducta, tales como rebeldía, angustia y tristeza.
La víctima le relató la situación de abuso sufrida y que su padre la amenazaba con matar a su hermano si lo contaba.
A partir de lo denunciado, la niña ingresó a su prestador de salud, donde se aplicó el protocolo para casos de abuso sexual. Allí fue atendida por un equipo multidisciplinario, de cuyo informe surgió un relato coherente con el abuso denunciado.
Entre otras cosas, de la pericia psicológica de la víctima surgió que tenía síntomas de estrés postraumático típico en niñas, niños y adolescentes que han sufrido violencia sexual.
El imputado aceptó los hechos que la Fiscalía le atribuyó y manifestó conformidad con la aplicación del proceso abreviado.
Además de la cárcel, se lo condenó a la pérdida de la patria potestad de sus hijos y a abonar a la víctima el monto equivalente a 12 ingresos mensuales o 12 salarios mínimos nacionales.
Al recuperar la libertad, con cinco días de antelación, la madre de la víctima debería ser notificada de la salida de la cárcel del abusador y este tendrá una medida de prohibición de comunicación y de acercamiento con la víctima por el plazo de 180 días.