El 26 de junio de 1973, Ruben Benítez tenía 22 años y era funcionario del Parlamento uruguayo. Ese día, también, se llevó a cabo la última sesión parlamentaria antes de que el expresidente Juan María Bordaberry disolviera las cámaras. Luego, vendría un golpe de Estado que duraría 12 años.
Este lunes 26, se realizó una sesión extraordinaria en el Parlamento por los 50 años del golpe de Estado. Participaron el presidente de la República, Luis Lacalle Pou, así como los expresidentes Julio María Sanguinetti, Luis Alberto Lacalle y José Mujica. Ruben Benítez también estuvo presente y recordó, en rueda de prensa, cómo se vivió aquella noche.
Según recuerda Benítez, el clima era de “nervios y preocupación” por “saber que se estaba gestando la última sesión del senado”, de que estaban a “horas de eliminar el sistema democrático”.
Un borrador de una noticia, que anticipaba lo que sucedería más tarde, daba vueltas entre los legisladores. Muchos estaban “preocupados”. Pero, también, había quienes “decían que se iba a superar la crisis y que eso no iba a pasar a mayores”.
“Entre las dos cosas era una ida y venida de datos y de versiones, que no era fácil atender”, dijo Benítez a la prensa.
Esa noche también abundaban las incógnitas: “Esa desazón de decir nos vamos ¿por cuánto? ¿En qué momento vamos a volver? ¿Cómo vamos a volver? ¿Va a haber lecciones dentro de poco tiempo? Todo muy confuso”, expresó.
“Lo seguro era que a partir de esa noche no teníamos más Parlamento”, concluyó.