Este miércoles 28 de febrero se cumplieron 21 años de arribo del último tren de pasajeros a la Estación General Artigas, que otrora fuera la principal terminal ferroviaria del país. El histórico inmueble pasó luego por diversas instancias judiciales en la que permaneció en un estado de abandono, y su destino futuro todavía es incierto.
Esa efeméride fue aprovechada por el colectivo Grupo de Pasajeros (GP) para reeditar un reclamo que manifiestan desde hace años: la restitución de la antigua estación a su cometido original.
En un comunicado, GP reclama “que se defina el retorno de los trenes al edificio de la mano de otros emprendimientos y que sea decidido por la ciudadanía” y no por “proyectos exclusivamente empresariales que solo buscan el lucro inmobiliario”.
Asimismo, piden que “el gobierno se defina respecto al servicio de pasajeros Montevideo-25 de Agosto” y que “se lleve adelante la restructura de AFE para que continúe circulando el tren Tacuarembó-Rivera, que corre riesgo de desaparecer por falta de personal para mantener el servicio”.
El colectivo reclamante considera que “es perfectamente viable que los trenes regulares de pasajeros vuelvan a salir de la Estación y potenciaría el servicio”, y entiende que “la mala ubicación de la nueva terminal, abierta el 1º de marzo de 2003, provocó la pérdida de unos 100.000 pasajeros por año de los trenes de la línea Montevideo-Progreso-25 de Agosto, debido a su alejamiento del centro de la ciudad”.
Además, subrayan que el histórico edificio que lleva décadas en desuso “es ideal para crear un centro de combinación con ómnibus en su entorno, debido a los accesos laterales y frontales que posee”.
Desde GP se enfatiza que “no existen estudios técnicos para justificar el desmantelamiento de la infraestructura ferroviaria de la Estación Central, pero sí existen estudios que avalan su reapertura ante el futuro crecimiento del transporte por riel”, y añaden que esa modalidad de transporte “puede convivir con otras actividades en la gran cantidad de espacio disponible, tanto en el edificio principal como en la playa de maniobras y construcciones anexas que no necesita”.
Uno de los proyectos presentados ante el Ministerio de Transporte y Obras Públicas en 2019 para recuperar la Estación Central, elaborado por Alcalde-Arrosa Arquitectos, contó con la colaboración del Grupo para recuperarla como terminal ferroviaria y transformarla en centro multimodal de transporte, “tendencia que han seguido varias ciudades del mundo al reabrir antiguas estaciones desafectadas en los años 60 y 70, subsanando errores históricos y reconociendo las ventajas del transporte ferroviario”, agrega el envío.
“En varias ciudades del mundo donde las estaciones fueron reubicadas se comprobó posteriormente el error debiendo luego devolver los trenes al lugar original, restaurando los históricos edificios (Quebec, Saint Paul, Washington D.C.) o construyendo nuevas estaciones en el antiguo emplazamiento (Auckland, Belfast, Hong Kong) a costos millonarios. En todos los casos se verificó un aumento del número de pasajeros después de la recuperación del antiguo punto terminal de los trenes”, añade la misiva.
“La Estación Central General Artigas fue adquirida por el Banco Hipotecario en 1998 para la realización de un proyecto inmobiliario (Plan Fénix) que no tuvo en cuenta los argumentos técnicos en contra de la clausura y consideraba al transporte ferroviario como algo obsoleto”, concluye el texto.