“Tierra de nadie”: dueños de boliches en Ciudad Vieja reclaman falta de respuesta policial

A mediados de enero de 2024 se conocía la noticia de que, a partir de una reunión entre autoridades del Ministerio del Interior, del Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay, de la Intendencia de Montevideo y del Municipio B, se decidió aumentar el patrullaje por las noches los fines de semana en Ciudad Vieja.

Un mes después, sin embargo, varios dueños de boliches y bares de la zona alertan que la situación de inseguridad y violencia sigue igual, y que el servicio 911 no interviene o demora en su respuesta ante altercados en la salida de los bailes, según lo manifestaron a Montevideo Portal.

“Un policía me dijo: ‘Nosotros acá no venimos’”, contó a Montevideo Portal Pablo Mas, uno de los dueños de Net Club (Rincón 734), lugar que fue protagonista de titulares en las últimas horas debido a que se viralizaron imágenes de una pelea entre jóvenes y patovicas en las afueras del boliche.

Según Mas, luego del anuncio en el que se afirmó que habría un refuerzo de los servicios en el barrio entre las 4:00 y las 6:00 horas los viernes, sábados y domingos, “pasaron policías la primera semana y no pasaron más”.

Jeiner, otro dueño de un baile ubicado en la calle Bartolomé Mitre entre Sarandí y Buenos Aires, declaró que en su cuadra han “tenido varios incidentes y problemas”, y que “se manda” guardia policial, “pero a la apertura de los boliches”.

“Nosotros lo que pedimos es que estén al cierre, al finalizar los boliches. Es ahí donde se arma, porque la gente sale alcoholizada, hay gente que queda en los alrededores que no son clientes nuestros, pero que, cuando salen los clientes, se empiezan a meter con ellos, les roban; obviamente salen con algún alcohol arriba y ahí empiezan las peleas”, detalló el empresario.

Otro comerciante, llamado Jorge, que tiene un bar por la misma calle que el anterior, expresó que no nota “para nada” el aumento del patrullaje a la madrugada y que la inseguridad “es una cosa de todos los días”.

“El tema es la gente que está afuera, que no puede entrar a ningún lado porque no los dejamos entrar. Son los mismos que van a Rincón y andan en moto o autos para arriba y para abajo. Y cada tanto bajan armados de los autos a amenazar”, describió quien, al igual que Jeiner, no quiso dar el nombre de su local ni su apellido, ya que entienden que esta situación los “perjudica”.

El hombre, de 64 años, tiene negocios en Ciudad Vieja desde hace 30 años y dice que “nunca había visto una cosa así”. “El terror que uno tiene es tal, que incluso no podemos denunciar porque igual vienen la semana que viene y se la agarran con nosotros”, declaró.

En su momento, el comisario mayor Franco Zenone, integrante de la Dirección de Convivencia y Seguridad Ciudadana, había dicho que se estaban “reforzando los controles dentro de los locales” y aumentando “la presencia policial”. “Se van a hacer operativos especialmente destinados a la hora de los cierres de los espectáculos”, había comprometido Zenone.

Toda la zona tiene cámaras de videovigilancia del Ministerio del Interior. Sin embargo, la respuesta de la Policía, según los relatos, tiene demoras de incluso más de una hora.

Jorge detalló que un día de semana hace poco llamó al 911 por un incendio ocasionado por una persona en situación de calle: “Tres veces llamé, porque se iba a prender fuego todo. Hora y 38 minutos demoraron en llegar”.

El propietario de Net Club, por su parte, consideró que “la calle es tierra de nadie”. “Hacen lo que quieren, andan en motos a contramano haciendo willy, me apedrean todo el boliche con total impunidad porque saben que la Policía no va”, explicó.

“Estos hechos después desencadenan lo que pasó el otro día [en referencia a los patovicas que golpearon a jóvenes], que no tiene justificación. Pero es mi negocio: si no hace algo la seguridad, tengo que hacer algo yo”, añadió.

Mas contó que su baile abrió en marzo de 2019 y que a mediados de ese mismo año ya comenzaron los problemas. “Ellos [por los policías] notaron que era un boliche que convocaba mucha gente, que generaba problemas por la cantidad de gente y por ahí por el público, y a partir de ese entonces ya dejamos de tener presencia y respuestas”, dijo.

El dueño del local bailable afirmó que ha radicado varias denuncias a la línea gratuita del Servicio de Gestión de Calidad gubernamental: 0800 5000.

Asimismo, narró que, a comienzos de setiembre de 2023, envió un correo electrónico dirigido a la Zona Operacional 1 de la Jefatura de Policía de Montevideo, al Ministerio del Interior y a Presidencia.

Allí manifestaba “la falta de respuesta” ante “cualquier tipo de llamado al 911”. “Es algo que asombra y asusta estar tan desamparados”, agregaba. Por último, pedía “una respuesta al tema y una explicación”.

Si bien la Jefatura de Zona 1 lo citó a una reunión con un agente, esta no fue lo que esperaba.

“Me dijo que de lo que pasa en la puerta del boliche me tengo que hacer responsable yo, cuando hay una normativa que establece que la seguridad privada no puede actuar en la calle. Me mintió en la cara”, afirmó Mas.

Los vecinos con locales nocturnos en la calle Bartolomé Mitre también mantuvieron reuniones con autoridades en varias ocasiones.

“Estuvimos reunidos hace dos o tres meses con el Ministerio del Interior, fuimos varios vecinos que tenemos comercios en la zona para hablar sobre este tema, incluso nos hemos reunido con gente de Convivencia de la Intendencia de Montevideo, pero prácticamente hemos sido ignorados”, dijo Jeiner.

“Varias veces lo hablé, no dan pelota. Que vengan un día y van a ver cómo va a funcionar”, agregó.

Ante esto, Jorge, otro de los comerciantes, consideró: “Yo sé cuál es la solución, es estar más arriba del problema, no sé por qué no lo hacen”. “Aparte, ven un patrullero y desaparecen a los 20 segundos, o sea, no queda nadie en calle”, sentenció.