Un grupo de madres de seis alumnas de la Escuela Agraria de Montes en el departamento de Canelones denunció a comienzos de junio de este año a un docente de la institución por agredir sexualmente a sus hijas, adolescentes de 14 a 16 años.
La Fiscalía de Pando investiga el caso y ya se dispusieron medidas cautelares de no acercamiento ni a las alumnas ni a la escuela agraria por parte del investigado.
“El profesor abusó físicamente de ellas tocando las partes de su cuerpo y, por eso, pusimos una denuncia y estamos pidiendo que se haga justicia”, dijo Constanza, madre de una de las adolescentes agredidas a Telenoche (Canal 4).
Asimismo, Constanza relató que el 3 de junio su hija asistió a un campeonato de fútbol organizado por el centro: “Estaba parada en la puerta de un salón y él vino y la tomó por atrás”. Ese mismo día radicó la denuncia en la Justicia y fue, así, la primera en hacerlo.
La madre dijo que con la denuncia buscan “luchar por algo por lo que un niño no tiene que pasar”.
Natalia, otra madre de una adolescente de 16 años, afirmó que “hace aproximadamente un mes” que ella tomó conocimiento de los abusos. “Venimos a pedir justicia”, planteó y contó que su hija “sufrió abuso, manoseo de parte del profesor adentro de una clase”.
“Él la abrazó, ella le dijo que no, a lo que él la aprieta y le toca partes que no tiene por qué. Esto pasó con ella el año pasado, ella estuvo guardando esto, hasta que se supo de más casos. Entonces ella ahí se animó a contar lo que había sucedido”, agregó Natalia que, tras esto, sumó su denuncia a la de Constanza y otras cuatro madres.
En tanto, el titular de la Dirección General de Educación Técnico Profesional (UTU), Juan Pereyra, que al hombre “se pasó a otro lugar y está cumpliendo tareas de mantenimiento sin contacto con alumnos”.
“Como tampoco podemos acusarlo de primera porque tiene su derecho, hicimos que el docente no tuviera contacto con los alumnos, se lo trasladó a otro lugar y se llamó a las familias involucradas. Luego se llamó a las familias del grupo que no estaban involucradas”, relató.
Pereyra manifestó también que es un tema que le preocupa “mucho” a las autoridades de la institución. “Lógicamente es un tema muy sensible y nos pone un poco mal”, ponderó.
Asimismo, se refirió a la “satisfacción” de que, una vez enteradas las autoridades, “rápidamente se actuó”, según planteó. “Se aplicaron todos los protocolos y, en menos de 24 horas, estaban todas las resoluciones tomadas, protegiendo a los alumnos”, expresó.
En referencia a la comunidad educativa que funciona en la UTU en donde se dieron las denuncias, afirmó que, en cuanto la institución tomó conocimiento del caso, “inmediatamente se buscó una alternativa”.
En esta línea, aseguró que la situación “está muy avanzada”. “En el caso de UTU la denuncia se pasó a Jurídica que está trabajando en el caso y las sanciones dependerán. Si se entiende que el docente es culpable puede corresponderle una destitución”.
Pereyra afirmó que las clases en el lugar se siguen dictando con normalidad y no hay “ningún alumno que haya dejado de concurrir al centro educativo por esta situación”.